Probablemente, cuando los agentes de la Sala de Emergencias de la Guardia Civil de Zaragoza recibieron la llamada de una señora denunciando que estaba siendo agredida por su pareja sentimental, no se imaginaban que acabarían encontrando una macroplantación con hasta 1683 plantas de marihuana. Cuando los agentes llegaron al lugar encontraron a la mujer con múltiples hematomas en su cuerpo y la trasladaron a un centro médico para que fuera explorada por facultativo. Al mismo tiempo, otra patrulla localizó a la pareja de la víctima en el exterior del domicilio, situado en el barrio de Garripinillos y lo detuvo por un presunto delito de lesiones en el ámbito familiar.

Durante la interposición de la denuncia por los hechos descritos, la víctima comunicó a la Guardia Civil que en el interior de la vivienda su marido tenía plantas de marihuana pero que desconocía la cantidad ya que no las había visto. Ante estos hechos, los agentes realizaron un registro en el inmueble, donde fue localizado un completo cultivo indoor de cannabis que se hallaba en el habitáculo destinado a garaje del domicilio. En ese lugar se encontraban 1.683 plantas de marihuana en avanzado estado de crecimiento que contaban con sistema de riego, ventilación e iluminación. En una habitación anexa, se hallaron fertilizantes y material necesario para el cultivo de esta sustancia, así como numerosas cuerdas colgadas en la pared destinadas al proceso de secado de las plantas una vez recolectadas.

Continuando con la inspección la Guardia Civil verificó que la plantación se suministraba de electricidad de manera ilícita, ya que la misma había sido enganchada del alumbrado público.

Por todo lo anterior, este varón, de nacionalidad italiana, 52 años y con antecedentes policiales, fue detenido por un presunto delito contra la salud pública por cultivo o elaboración de droga y otro de defraudación de fluido eléctrico. Quedará a disposición judicial en las próximas horas.