Casa Vallés, el bar empleado por los vecinos de Broto como centro de reunión, estuvo ayer cerrado. Ni la jubilación de sus anteriores dueños ni la temporada baja lo habían conseguido anteriormente. La razón de ello era la muerte violenta de Geovanny Valencia, el joven de 25 años que la regentaba, a manos de su expareja. Mientras la localidad seguía conmocionada por lo sucedido, la Guardia Civil hizo la reconstrucción de los hechos con la detenida, quien confesó el crimen.

En actitud colaborativa, Daniela Valencia, de 22 años, regresó al piso de la víctima, quien se hacía llamar Yovany. Allí el día anterior le encontró cadáver y con heridas de arma blanca por una patrulla de la Guardia Civil de Torla. Los agentes se encontraban realizando gestiones para averiguar el paradero de una persona, cuyos familiares habían denunciado su desaparición.

Acompañada por el abogado zaragozano que designó su familia, Eladio José Mateo, la joven de 22 años, natural de Colombia al igual que el fallecido, estuvo en el interior de la vivienda sobre una hora y media. Allí explicó que hubo una discusión porque la víctima tenía celos de que hubiera rehecho su vida sentimental con otro hombre. Ello derivó en una pelea con un trágico final que, según su línea de defensa, en ningún momento buscó.

En paralelo a estas labores de investigación del Equipo Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca, el Ayuntamiento de Broto celebró un pleno extraordinario. Lo convocó su alcaldesa, Carmen Muro, que se mostró visiblemente conmocionada, al igual del resto de vecinos.

MUNICIPIO SEGURO

Durante el mismo, Muro tuvo palabras de cariño y apoyo para la familia de la víctima mortal, además de resaltar que esta localidad pirenaica es segura.

Tras el acto en el que acordaron tres días de luto oficial con banderas a media asta, todos los asistentes realizaron un minuto de silencio en las puertas del consistorio. En el mismo participaron los padres de Yovany, sus dos hermanos y varios familiares, quienes recibieron el cariño de todos los allí presentes.

El cuerpo de la víctima continúa en dependencias del Instituto de Medicinal Legal de Aragón (IMLA) en Huesca, a la espera de ser entregado a sus seres queridos cuando el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Único de Boltaña así lo acuerde.

Daniela Valencia podría pasar a disposición judicial hoy o el martes si la Guardia Civil no ha terminado las diligencias de investigación. La ley permite un plazo máximo de 72 horas de detención.