La Policía Nacional ha detenido en Zaragoza a siete personas de una misma familia, cinco varones y dos mujeres, como presuntas autoras de varios delitos de receptación cometidos al poner a la venta artículos de droguería y cosmética previamente sustraídos de varios supermercados.

En la operación, denominada "Caries" y realizada ayer, se inspeccionaron ocho puestos del Rastro Municipal de Zaragoza, de los que tres fueron clausurados, así como una tienda ubicada en la calle Sobrarbe.

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón han informado de que las investigaciones comenzaron hace meses y han permitido constatar que los detenidos se dedicaban a vender en estos puestos artículos de droguería y cosmética mediante ofertas y a precios inferiores a los de mercado.

Algunos de estos artículos habían sido marcados, a modo de señuelo, por la Policía Nacional tras haber mantenido varias reuniones con representantes de supermercados de Zaragoza alertados por el alarmante incremento de hurtos de este tipo de productos.

En total, se pusieron en circulación 100.000 artículos marcados de los que fueron detectados ayer en el Rastro 217 en varios puestos.

Además se intervinieron otros 3.200 de procedencia presuntamente ilícita dado que los comerciantes carecían de facturas.

Según las fuentes, las pérdidas ocasionadas a los supermercados por este tipo de delitos superan los 50.000 euros en 2014.

En el dispositivo policial han intervenido agentes del subgrupo de Hurtos de la Brigada Regional de Policía Judicial, apoyados por miembros de la Brigadas Provinciales de Policía Científica y de Seguridad Ciudadana, así como por la XI Unidad de Intervención Policial.