El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Huesca ya denunció hace varios años al matadero Fribín de Binéfar por supuestas irregularidades en el tratamiento de sus residuos. Desde hace cuatro meses, los vertidos, según Ecologistas en Acción, se realizan en una finca de secano de la empresa. Pero el principal problema procede de un conflicto administrativo entre los departamentos de Medio Ambiente y de Agricultura de la DGA. Fuentes de Medio Ambiente explicaron que el matadero pidió un permiso para la gestión de "lodos de depuradora", pero que nunca se concedió porque empleaba el "desvaste", una práctica por la que sólo se separan los líquidos de los sólidos y no los distintos tipos de sólidos. Por eso, Medio Ambiente cree que los residuos son cárnicos y que el estudio de ellos es "agrícola". Sin embargo, fuentes de Agricultura indicaron que los restos son "inertes" y señalaron que la competencia debe ser de Medio Ambiente.