El presidente de Aragón, Javier Lambán, se ha mostrado hoy dispuesto a llegar a un acuerdo bilateral con el Ayuntamiento de Zaragoza, en forma de convenio, para bajar los recibos que pagan los zaragozanos por la depuración de las aguas inicialmente en un 10 por ciento, y después en un 20 por ciento, a partir de 2020.

En su comparecencia ante el Pleno de las Cortes a petición de Podemos, el presidente ha apostado por derogar el actual Plan de Saneamiento y Depuración y construir uno nuevo, pese a que no es posible derogar todas las concesiones en marcha, además de cambiar el peso entre la cuota fija y la variable o aplicar criterios de progresividad.

Fuentes del Gobierno han explicado que la propuesta de Lambán plantea dos opciones.

La primera consiste en que la DGA asume los gastos de depuración que ahora afronta el Ayuntamiento zaragozano, lo que conllevaría una rebaja en el recibo de un 10 por ciento al inicio y de un 20 por ciento después. Según esta opción, el ICA se seguiría cobrando con un 60 por ciento de bonificación y luego de acuerdo con la reforma que se pacte.

La segunda opción ofrecida al consistorio, de acuerdo con la versión de las fuentes del Gobierno, es que el Ayuntamiento gira el ICA a los zaragozanos, de modo que llegue sólo un recibo, y la DGA asume la mitad de los costes de la gestión.

Dichas fuentes han concretado que del consistorio que gobierna ZeC depende elegir una opción, si bien ésta habría de formalizarse en un convenio independiente de la reforma del ICA.

Lambán, durante su comparecencia, ha destacado que con el acuerdo alcanzado en la mesa técnica, el compromiso "pre-presupuestario" con Podemos para plantear una modificación del ICA está "cabalmente cumplido". Para la formación morada, sin embargo, ha sido un "fracaso".

El presidente ha defendido que los diez criterios generales acordados en el plazo marcado de tres meses eran lo único que cabía esperar y no ningún tipo de documento técnico ni un borrador de proyecto de ley.

En este sentido, ha reiterado que "la fiscalidad no se acuerda con la sociedad, ni aquí ni en ninguna democracia del mundo", por lo que las próximas fases incumben exclusivamente al ámbito político.

Ha lamentado que organizaciones como la Red por el Agua Pública de Aragón (RAPA), presente hoy en la tribuna, se descolgaran de la mesa justo antes de llegar al acuerdo definitivo o que el Ayuntamiento de Zaragoza no asistiera a ninguna reunión reclamando una bilateralidad que "no procede en modo alguno", dado que el ICA afecta a toda la comunidad autónoma.

Del mismo modo, Lambán ha tachado de "ofensivas" las "descalificaciones" hacia organizaciones firmantes, tan representativas de la sociedad aragonesa como las no firmantes, en especial hacia la Federación Aragonesa de Municipios Comarcas y Provincias (Famcp), "la más representativa de todas".

La única manera de depurar, ha continuado, es a través de un impuesto y no de una tasa, ya que quedan 300 plantas por construir para solamente un 10 por ciento de la población, en un sistema en el que ciudades medianas y pequeñas, y no solo Zaragoza, contribuyan al saneamiento de las aguas en el resto de municipios.

No obstante, aunque ha reconocido que "no hay tiempo que perder", ha subrayado que no ve ninguna diferencia "insalvable" entre lo que propone la RAPA, la Famcp, Podemos y el propio Gobierno.

Desde la formación morada, Nacho Escartín ha recalcado que el acuerdo alcanzado en la mesa aporta "muy poco" para modificar este impuesto "injusto" y no incluye ninguna propuesta concreta.

Ha insistido en que no rechaza pagar impuestos, pero sí el ICA, por ser "injusto", "abusivo" y "bajo sombra de corrupción".

Escartín ha puesto sobre la mesa las propuestas lanzadas por la RAPA y por el catedrático de Derecho Financiero y Tributario de la Universidad de Zaragoza Ismael Jiménez, que supondrían una reducción del pago del 60 por ciento, de 42 a 13 euros en una familia de tres personas.

En cuanto al coste, 34 millones provendrían de una tasa autonómica, otros 8 de un impuesto ambiental que aportarían los ayuntamientos por "corresponsabilidad" y 11 los aportaría el Gobierno de Aragón para pagar los sobrecostes del "pufo del plan del PAR".

Tres puntos principales debe contener la propuesta de reforma, en palabras del líder de Podemos Aragón: que ningún ciudadano pague más por el agua que la media española, anular las obras del antiguo plan para evitar la "quiebra financiera" y devolver la gestión a los ayuntamientos en los que sea factible para que esta sea "cien por cien pública y más económica".

En el turno del resto de grupos parlamentarios, la portavoz popular, Mar Vaquero, ha centrado su intervención en criticar la "mala conciencia" de Podemos, al que responsabiliza de que no se haya hecho "nada" para modificar el ICA por haber apoyado todos los presupuestos de la legislatura.

Ha apuntado que no puede estar de acuerdo al cien por cien con los estudios presentados, pero sí en la necesidad de reformar el ICA, y ha cargado contra la formación morada, a la que ha acusado de hacer "política de teatrillo" y de "utilizar a los movimientos sociales" cuando "han vuelto a tragar" en este asunto.

El portavoz del PSOE, Javier Sada, ha criticado la "insumisión fiscal irresponsable" promovida por el Ayuntamiento de Zaragoza, ha pedido respeto a las conclusiones de la mesa técnica y ha instado a todos a concretar alternativas, porque los ciudadanos demandan una modificación que sea más justa, solidaria y que no se pague más que en el resto del país.

Desde el PAR, Arturo Aliaga ha pedido "elevar el debate" y no "empezar la casa por el tejado", en referencia a tocar el impuesto antes de rediseñar el Plan de Saneamiento y Depuración.

La portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, ha sostenido que Podemos lleva una legislatura entera "tragando ruedas de molino" con el Ejecutivo PSOE-CHA, pero con el ICA "se está tragando la rueda del camión más grande del mercado", aunque ha coincidido con Escartín en que lo que ha presentado la mesa técnica no es más que "un catálogo de principios" del "capítulo uno" de un manual de derecho fiscal y financiero.

Por su parte, Patricia Luquin (IU) ha tachado de "desleal" que Lambán haya contado su propuesta en la tribuna antes de hablar con el Gobierno de Zaragoza y le ha instado a hablar de alternativas para garantizar que el ICA se dedica al ciclo integral del agua y es "transparente".