Lam®ita Popa rechazó ayer nuevamente las ayudas y medidas de protección que le ofrecieron los responsables de Servicios Sociales y se opuso fuertemente a que el organismo público se haga cargo de la custodia de su hijo.

La mujer, que dio el pecho al niño, lloró desconsoladamente, pero rehusó la propuesta de la DGA de que ingresara temporalmente en un centro especial de la DGA, lo que le permitiría seguir en contacto con su retoño.

Esta actitud puede deberse al hecho de que teme la reacción de la mafia de mendicidad infantil por la que es explotada y que la trajo a España desde Rumanía con la finalidad de que pidiera limosna.

El niño, que cuenta con dos semanas de vida, se encuentra en perfecto estado de salud y se halla bien alimentado, según indicaron fuentes del Departamento de Servicios Sociales y Familia de la DGA. El Gobierno de Aragón asume, a la espera de que la medida sea ratificada por instancias judiciales, la protección del niño en sus instalaciones.

Tras rechazar las ayudas oficiales, Lam®ita volvió a la calle y mendigar y ya no volvió al Jardín de Infancia de la DGA donde quedó ingresado su pequeño, por lo que tiene que ser alimentado con biberones. Los Servicios Sociales de la DGA investigan ahora si Lam®ita tiene a su cargo otro hijo de 3 años.