Los profesionales del servicio de Urgencias de Atención Primaria de Zaragoza, con el apoyo de la Sociedad Aragonesa de Medicina Familiar y Comunitaria (Samfyc), mostró ayer su rechazo al cierre de las Urgencias nocturnas del centro de salud de Sagasta de Zaragoza, anunciado por el Salud a partir de agosto.

Para el colectivo, la clausura del Punto de Atención Continuada (PAC) supone "otro ataque más a la sanidad pública y a la Atención Primaria" y evidencia que "de nuevo con la excusa del ahorro y la eficiencia se quiere cerrar un servicio que precisamente se creó para ahorrar por dar una atención más eficiente y de calidad para aquellas urgencias que se pueden atender desde la Atención Primaria".

Por eso, los médicos, que recuerdan que el PAC se creó de cara a "responsabilizar a los usuarios del empleo de servicios de Atención Primaria en aquellas urgencias que puedan evitar saturar nuestros hospitales", critican que el cierre pretende "enviar un mensaje diferente al ciudadano, trasladando la atención de procesos que se pueden atender desde la Atención Primaria, que es más barata y de cercanía, a un centro hospitalario".

En ese sentido, los profesionales subrayan que "en nuestros hospitales se da asistencia de calidad, pero no pueden asumir más Urgencias sin aumentar los tiempos de espera y sin hacer un gasto económico mayor" y exponen que "es difícil averiguar cuáles son las intenciones de la consejería cuando se pretende eliminar un servicio que funciona, pues atiende más de 8.000 pacientes al año en el turno de noche con la dotación de un celador, un enfermero y un médico".

El colectivo apela a la "responsabilidad de nuestros dirigentes" por la "eficiencia y sostenibilidad del sistema de asistencia sanitaria sin la merma de los servicios".