La nieve caída en las últimas horas en la provincia de Zaragoza ha ocasionado la congelación de los intercambiadores de ancho de vía de Renfe ubicados en los municipios de Casetas y Plasencia de Jalón, lo que ha derivado en importantes retrasos en los convoyes Alvia que conectan Pamplona con Madrid y Barcelona.

Fuentes de Renfe han explicado que la nieve ha provocado la congelación del sistema de intercambiador de vía, que permite a los trenes Alvia pasar del ancho de vía de alta velocidad al tradicional, lo que hace que este proceso esté creando retenciones de trenes de diversas líneas.

Los trenes Alvia que unen Pamplona con Madrid, en ambos sentidos de la circulación, han acumulado un retraso de noventa minutos.

Los Alvia que enlazan la capital navarra con Barcelona, también en ambos sentidos de la marcha, registran un retraso de una hora.

Por contra, los trenes del servicio regional, que presta en las vías de ancho tradicional, circulan con normalidad, según las mismas fuentes.