Con varios meses de retraso, el nuevo parque de Bomberos de Casetas de Zaragoza estará listo en primavera para dar la bienvenida a la dotación de bomberos del barrio rural. Tendría que haber estado terminado antes del pasado verano, pero los imprevistos acumulados han provocado que el calendario se haya visto alterado y, a día de hoy, todavía no hay una fecha concreta para cortar la cinta de inauguración, aunque todo apunta a que será antes de las próximas elecciones municipales de mayo.
Según explicaron desde Servicios Públicos, la instalación está completamente diáfana, ya que el contrato para amueblar el cuartel sigue en contratación y todavía se están terminando los contratos relativos a los suministros.
La inversión inicial prevista era 1,3 millones, y su construcción estaba financiada por la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) en el marco del convenio firmado con el ayuntamiento. Este parque da respuesta a una reivindicación histórica al solucionar una de las grandes carencias del actual parque y las horas de servicio. Ahora solo hay turnos de mañana y tarde.
INSTALACIÓN
Las instalaciones actuales, obsoletas, están ubicadas en el centro del barrio en una estrecha calle, lo que dificulta y ralentiza la salida de los camiones en casos de urgencia. Por ahora se desconoce qué se hará con este inmueble, aunque desde el consistorio querían darle una segunda vida, lo que obligaría a realizar una reforma.
Con la inauguración del cuartel habrá dos dotaciones con cinco bomberos cada una, que prestarán servicio de forma ininterrumpida durante las 24 horas y se atenderán las urgencias de los barrios de Casetas, Monzalbarba y Alfocea, así como a los municipios de Utebo, Torres de Berrellén y Sobradiel, entre otros.
La parcela elegida para su construcción, de 1.800 metros cuadrados, se encuentra a las afueras del barrio rural para facilitar así que las dotaciones puedan salir con rapidez, ya que tiene acceso directo a la carretera nacional y a la avenida Logroño de Casetas. Hasta el nuevo parque se trasladará un autotanque, una escalera, un vehículo nodriza y otro ligero.
La superficie total construida es de 1.245 metros cuadrados, de los que 522,95 corresponden a la nave destinada a los vehículos y 722,15 a dependencias administrativas y de estancia.
El edificio, con forma de L, tiene dos alturas, aunque la mayor parte del inmueble se concentrará en la planta baja donde habrá salas de estar, vestuario, el centro de comunicaciones o el gimnasio. La segunda está pensada para los cuartos de instalaciones y almacén de los materiales necesarios.
