La nueva consejera de Sanidad, Pilar Ventura, ha garantizado hoy la continuidad del proyecto socialista en este departamento en los diez meses que quedan para las próximas elecciones autonómicas, con su propio estilo de gestión y asumiendo que todo es "mejorable", como las listas de espera.

Así lo ha asegurado tras prometer su cargo en un acto presidido por el jefe del Gobierno, Javier Lambán, y al que han asistido el consejero saliente, Sebastián Celaya, casi todos los miembros del gabinete, la presidenta de las Cortes, Violeta Barba, el Justicia de Aragón, Ángel Dolado, el presidente de la Cámara de Cuentas, Antonio Peña, y varios portavoces y diputados, entre otras personas.

Tras anunciar Celaya ayer su dimisión, Ventura asume el cargo desde la secretaría general técnica y número dos de la Consejería, "cargada de responsabilidad" y una vez cumplidos prácticamente todos los objetivos del Ejecutivo de Lambán, ha subrayado, a pesar de las dificultades tras unos recortes en Sanidad "importantísimos" por la crisis en la legislatura pasada.

"Vengo para trabajar por la Sanidad, y en Sanidad siempre hay mucho trabajo", ha incidido Ventura, quien ha apuntado que es un servicio público "muy delicado" con una demanda "ilimitada" como derecho fundamental, y atenderla es la responsabilidad del Gobierno, y el actual, a su juicio, ha hecho una gestión "magnífica", con un aumento presupuestario de 401 millones de euros desde 2015.

Gracias a este esfuerzo se han conseguido los grandes objetivos, como la puesta en marcha de dos hospitales, algo "casi inaudito" en una legislatura, ha enfatizado la consejera, cuyo su objetivo es dar continuidad a la trayectoria de Sanidad de estos tres años.

Ha indicado, no obstante, que "todo es mejorable", como las listas de espera, que son "la cruz" que arrastran todos los Gobiernos, la puesta en marcha de nuevos centros de salud, si la consejería pudiera contar con más recursos, o en el ámbito de los profesionales sanitarios.

Ventura ha restado importancia a las discrepancias que ha habido en el seno del departamento, porque "indudablemente" surgen en un área como la Sanidad y además bien gestionadas pueden dar unos resultados "más eficientes", y ha avanzado, respecto a posibles cambios, que es "lógico" que se produzca alguno y lo que haga será "de forma inminente".

Lambán, por su parte, ha destacado la valía de Ventura, a la que conoció cuando era consejera de Ciencia, Tecnología y Universidad en el gobierno de Marcelino Iglesias y él alcalde de Ejea de los Caballeros, una relación que dio lugar a actuaciones de "mucho fuste" y que le sirvió para cerciorarse de que está muy cualificada desde el punto de vista profesional, técnico y académico, además de muy comprometida con el proyecto político que comparten.

El presidente se ha mostrado seguro de que Ventura va a estar "a la altura" de la responsabilidad, para "rematar" la tarea iniciada por Celaya, un "amigo" que aceptó ser consejero de Sanidad después de emplearse "a fondo" para convencerlo, porque nunca pugnó por el cargo, y al que no ha podido comprometer hasta el final de la legislatura al decidir pasar "a la vida reposada" de la jubilación.

La marcha de Celaya se produce ahora, al concluir el curso político como le pidió Lambán, una vez resuelto satisfactoriamente el expediente de la licitación del Hospital de Teruel.

También, ha concluido el presidente, con la garantía de que el relevo se produce de la manera "más ordenada posible", sin alterar la estabilidad del Gobierno.