Los especialistas en Balística de la Jefatura Superior de Policía de Aragón han llegado a la conclusión de que las armas intervenidas al hombre que la emprendió a tiros en un bar del zaragozano barrio de Delicias, hace una semana, eran inestables y peligrosas para cualquier persona que las empleara.

Así lo ha señalado este lunes el Cuerpo Nacional de Policía a través de un comunicado en el que describen el arsenal intervenido a P. F. B.. Hallaron diversas armas de fuego detonadoras desmontadas, piezas de armas sueltas, munición de diferente calibre, sustancias utilizadas para confeccionar munición, tres silenciadores, uno comprado y otro fabricado de forma artesanal y diversas herramientas.

Todo ello evidencia, tal y como adelantó EL PERIÓDICO y que ahora comunica la Policía, que el detenido se dedicaba a confeccionar y transformar armas incompletas o piezas de las mismas en armas capaces de efectuar fuego real. Unas armas que escapaban de los controles legales y administrativos establecidos, pudiendo ser utilizadas en la comisión de infracciones penales que atenten contra la vida e integridad física de las personas.

Los hechos por los que fue detenido y ahora se encuentra en prisión provisional ocurrieron el domingo día 9 de febrero en el bar El Cubetazo, en la zaragozana calle de San Rafael, cuando sobre las 08.20 horas, P. F. B. de 54 años de edad, realizó varios disparos al techo del local con el consiguiente riesgo generado para la seguridad ciudadana y el orden público, llegando, por un rebote de un proyectil, a herir aunque no de forma grave a un cliente. El motivo de esta actuación: la desaparición de su cazadora en el interior del local.

Dos clientes que se encontraban en el lugar le redujeron y una dotación de los UAPO de la Policía Local de Zaragoza le arrestó.