El PP ha subido el tono de la precampaña con su oposición frontal a los decretos leyes del Gobierno, que ha recurrido ante el Tribunal Constitucional, y sus duras críticas al carácter "abertzale y electoralista" de algunas de estas normas, aprobadas ayer en el Congreso.

El líder del PP, Pablo Casado, ha aludido al terrorismo de ETA al asegurar que nunca va a hablar "con un partido que no ha pedido perdón por la muerte de más de 800 personas" y ha reprochado al Gobierno que el líder de esta formación, Arnaldo Otegi, "presuma de ser una pieza clave para el Ejecutivo" tras apoyar ayer Bildu los decretos.

DE OTEGI A MAROTO

Así, la figura de Otegi ha cobrado protagonismo a una semana del inicio de la campaña electoral, al asegurar que en la próxima legislatura los diputados y senadores "soberanistas de izquierdas" serán "más y más decisivos", algo que ha despertado las críticas del PP que acusa al Gobierno de buscar el apoyo de "un proetarra".

Los socialistas han replicado aludiendo a que el vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, pactaba con EH Bildu cuando era alcalde de Vitoria, algo que ha sido negado desde Génova. El PP ha explicado que lo único que se produjo fue el voto a favor de la formación abertzale a la obra de una estación en Vitoria.

Por eso, consideran que es "muy diferente" y no se puede comparar en absoluto con buscar un acuerdo para el apoyo de EH Bildu, "negociar ese voto y conseguirlo" para sacar adelante los decretos leyes del Gobierno en el Congreso, de los cuales el PP ha recurrido hoy el de los permisos de paternidad y el de alquiler de vivienda.

MÁS SUPUESTOS PARA PRISIÓN PERMANENTE

Casado también se ha comprometido a que, si se convierte en el próximo presidente del Gobierno, ampliará en cinco (de seis a once) los supuestos para aplicar la prisión permanente revisable, incluyendo, entre otros, la ocultación del cadáver.

Los nuevos supuestos son "asesinato con ocultación del cadáver, asesinato tras secuestro, violadores reincidentes, asesinato por incendios con víctimas mortales o sustancias químicas o biológicas que produzcan estragos y asesinato después de ciertos supuestos de violencia de género".

Estos se unirían a los seis ya existentes, relativos a "asesinato a menores o discapacitados, asesinato tras cometer un delito sexual, asesinato en el seno de una organización criminal o terroristas, la reincidencia por un mismo condenado, los crímenes de lesa humanidad y el asesinato del Rey de España o de un jefe de Estado extranjero que se halle en España".