El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz decretó prisión incondicional y al mismo tiempo dictó el procesamiento de la miembro de ETA Miren Itxaso Zaldua Iriberri, detenida el pasado martes en Hernani, por el asesinato en 2001 del presidente del PP de Aragón, Manuel Giménez Abad. Zaldua fue expulsada en 2017 a España tras cumplir condena por integración en ETA.

Pedraz explica que de las diligencias practicadas hasta ahora se infiere indiciariamente la participación de Zaldua Iriberri, alias Sahatsa, en ese asesinato terrorista, al menos como colaboradora, según un reconocimiento fotográfico y la declaración testifical en sede policial y ante el juez prestada por un testigo protegido.

Ello se ve reforzado por las conclusiones del informe del pasado 10 de marzo del Servicio de Información de la Guardia Civil y los informes de Inteligencia de la Comisaría General de Información del 5 de diciembre del 2019 y 25 de junio del 2020, que trazan un perfil de la estructura, componentes y atentados presuntamente cometidos por el entramado Basajaun de ETA. Según el juez, «pudieran corresponderse con el autor material del asesinato del señor Giménez Abad (Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, alias Ata) y su colaboradora (Miren Itxaso Zaldua), cuya integración en la organización criminal era desconocida para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el momento de la comisión de la acción terrorista».

Su fotografía no habría formado parte de los fotogramas que se mostraron a los testigos del atentado en un primer momento, lo que hace más valorable la declaración del testigo protegido, porque esa fotografía nunca había sido difundida por los medios de comunicación escritos o digitales.

De acuerdo con el relato de hechos del auto de procesamiento, entre las 18 y las 18.30 horas del 6 de mayo del 2001, el que fuera presidente del PP de Aragón Manuel Giménez Abad se dirigía con su hijo al estadio de La Romareda de Zaragoza cuando Ata le abordó por la espalda y le disparó tres veces en la cabeza, que le produjeron la muerte en el acto.

El autor de los disparos huyó corriendo, cruzándose por el camino con varios testigos a los que apuntó con la pistola, mientras el hijo de Giménez Abad le increpaba gritando: «Cabrón, me has jodido la vida; ETA asesina».

Durante su huida, continúa el auto, en un determinado momento Ata se cruzó con una mujer «bajita, de mofletes rollizos, ojos negros» que vestía de color oscuro y con gorro tipo bombín y abrigo pese a ser mayo, que daba seguridad a cierta distancia al autor de los disparos (realizados con la misma arma que sirvió para asesinar a Joseba Pagazaurtundua) y a la que entregó un objeto que no se puede precisar, tras lo cual cada uno huyó en direcciones opuestas, el primero corriendo y la segunda con paso ligero.

«De las actuaciones practicadas y reconocimientos habidos durante esta instrucción se puede concluir que la mujer que se cruzó con el autor de los disparos es Miren Itxaso Zaldua Iriberri», señala el auto.