Muestras de escaparatismo medieval, exposiciones de indumentaria de la época, animación de calle, farsas burlescas, desfile de compromisarios, lectura de poesía y mercadillo... Caspe acoge el próximo fin de semana la recreación de un compromiso histórico que lleva el nombre del municipio.

Hace casi seis siglos, los representantes de los reinos de Aragón, Valencia y Castilla dieron un ejemplo histórico de democracia al resolver pacífica y ecuánimemente la situación de vacío monárquico creada tras morir sin descendencia el rey Martín el Humano . Los representantes de los tres reinos principales de la Corona de Aragón, con la intercesión de personajes históricos como Berenguer de Bardají, el Papa Luna y san Vicente Ferrer, fueron capaces de sentarse en una misma mesa en 1412 para dialogar y alcanzar ecuánimemente un compromiso --el de Caspe-- que diera solución al conflicto.

Casi seiscientos años después, aquel ejemplo histórico de concordia y solidaridad se mantiene todavía en la memoria de los aragoneses y sus vecinos, pero tal vez sólo en la memoria. Algunos de los mismos protagonistas, aunque en un escenario muy distinto, no han sido capaces ahora de sentarse en una mesa para alcanzar una solución acorde a otro gran conflicto como es el trasvase del Ebro.

En el siglo XV, la importancia de la Corona de Aragón, que comprendía los territorios de Aragón, Cataluña, Valencia, Baleares, Córcega, Cerdeña y Sicilia, hizo aparecer muchos pretendientes al trono. El Compromiso de Caspe permitió, mediante una votación ecuánime y pacífica, elegir como sucesor real al infante don Fernando de Antequera, de la dinastía Trastámara, evitando una guerra fratricida.

En el siglo XXI, los representantes de las regiones afectadas por el conflicto del agua mantienen ancladas sus posturas sin ser capaces de alcanzar una solución consensuada que agrade a todos. Afortunadamente, la solidez del sistema democrático --que algo ha bebido sin duda de aquel compromiso-- permite al menos que tampoco ahora llegue la sangre al río.

Un millar de personas

"Caspe es un pueblo comprometido, y más de un millar de personas se van a comprometer para que las fiestas del Compromiso sean un éxito", así de rocambolesca y convincente fue la invitación que la teniente de alcalde, Prado Murillo, hizo a todo el público para que se una a esta fiesta que se celebrará el próximo fin de semana.

Con numerosos actos se pretende conmemorar "un hecho importantísimo para la comunidad", según explicó ayer la vicepresidenta primera de las Cortes de Aragón, Ana Fernández, durante la presentación de estos festejos en el marco de la Aljafería. La alcaldesa de Caspe, Teresa Francín, destacó asímismo el carácter popular de estas fiestas, declaradas de Interés Turístico de Aragón, "unos festejos a los que el pueblo ha dedicado todo su esfuerzo durante los últimos meses". A juicio del director general de Turismo del Ejecutivo autonómico, Benito Ros, "el turismo es un sector pujante, de dinamismo, y que contribuye al desarrollo de Aragón".

Por último, el presidente de la asociación Amigos del Castillo del Compromiso, Alfredo Grañena, explicó que estas fiestas comenzaron siendo una humilde representación teatral de una decena de caspolinos y, actualmente, intervienen más de mil personas. Según Grañena, "conocer más nuestro pasado sirve para entender mejor nuestro presente y mirar con más esperanza nuestro futuro".