La situación epidemiológica actual en Aragón puede conllevar la aparición de brotes de coronavirus en zonas concretas de la comunidad. Así lo explicó ayer la consejera de Sanidad, Sira Repollés, en su primera visita al hospital Miguel Servet desde que prometió el cargo, y en la que aportó una visión global de la epidemia en Aragón.

«Estamos en una situación infinitamente mejor que la anterior, pero no podemos bajar la guardia. Cualquier distracción que tengamos respecto a las medidas de protección en la fase 3 puede hacernos retroceder», advirtió. En la fase actual de desescalada, y también en el momento epidemiológico en el que el covid-19 sigue presente pero en una tendencia descendente, «es esperable que haya estos pequeños repuntes que pueden aparecer en algunas zonas concretas», aseguró. Es el caso de centros de trabajo o áreas agrícolas, principalmente, mientras que actualmente ya no hay «ningún brote en ninguna residencia de la comunidad», que han sido las más castigadas de la pandemia.

«Lo importante», insistió la consejera, «es hacer frente a estos repuntes, detectarlos en tiempo récord y controlarlos». E incidió en que la comunidad tiene «todos los dispositivos preparados», puesto que esta es una de las exigencias del Ministerio de Sanidad para aprobar el paso de fase. Se exige «tener las capacidades estratégicas suficientes para hacer frente a una segunda oleada, pero también el sistema de información para detectar a tiempo real los nuevos contagios» indicó. Unas premisas que se cumplen en Aragón, subrayó la titular de Sanidad.

TRES FALLECIDOS MÁS

Salud Pública notificó este jueves 8 nuevos casos de coronavirus en Aragón confirmados a través de PCR, un incremento del 0,1% respecto al día anterior. Durante la jornada se produjo un ingreso en planta, ninguno en uci y 24 altas epidemiológicas. Además, la comunidad ha registrado tres fallecimientos más en la última semana (ninguno en los últimos cinco días), y acumula 901 muertes desde el inicio de la epidemia. El departamento dio a conocer también que mientras la media de fallecidos por todas las causas en esta época del año es de 200 semanales, en estos momentos se observan entre 160 y 190.

Sin embargo, se produce un goteo de nuevos contagios, casi 80 en la última semana. La mayor parte de ellos, según indicó la consejera, corresponden a «brotes concretos» que se producen en «circunstancias especiales» donde la población está «más expuesta». «Fundamentalmente son en zonas de trabajo de temporeros del Bajo Cinca, con una población flotante y donde esperábamos que pudieran surgir estos problemas, por lo que intentamos anticiparnos con una orden específica para los trabajos agrícolas que mejore las condiciones de alojamiento y trabajo». E insistió: «Lo importante es detectarlos a tiempo, realizar el aislamiento y controlar el brote».

«Tenemos reservas de mascarillas para 6 semanas»

La consejera Repollés aseguró ayer que el Ejecutivo autonómico cuenta con las reservas estratégicas de material sanitario suficientes para hacer frente a las próximas semanas. En concreto, recordó que se cuenta con las 400 camas extra del hospital de campaña que podrían utilizarse si fuera preciso. En cuanto a los respiradores, hay más de 165 en el almacén de Plaza. Y aseguró que hay mascarillas suficientes para el suministro a la población durante al menos seis semanas. También indicó que «hay equipos de protección individual y batas» para hacer frente a seis semanas de uso «en cantidad máxima». Los guantes de nitrilo «escasean más», pero indicó que «no hay desabastecimiento» puesto que se usan guantes dobles de los disponibles.