Sales de fiesta el fin de semana y te lo pasas fenomenal. Pero sin darte cuenta, mientras bailas en la discoteca, las letras de las canciones que escuchas se graban en tu cabeza de manera inconsciente sin que te pares a pensar en el mensaje que transmiten. Unas canciones que, en ocasiones, contienen letras machistas y violentas que cosifican y denigran a la mujer y que tienen un impacto mayor en nuestro cerebro del que nos pensamos.

«Pégala, azótala, sin miedo que no hace nada, si sonríe es que le gusta», «no me hagas abusar de la ley, si sigues con esa actitud voy a violarte» o «me pide más, aún sabiendo que la puedo lastimar, no es culpa mía si me porto mal». Son solo algunos de los ejemplos que unos estudiantes de una escuela de arte de Cuenca han recogido en el video ¿Cómo te suena?, un proyecto educativo que tiene como objetivo denunciar el machismo que existe en algunas canciones que consumen los jóvenes.

Sin música de fondo, varios chicos y chicas reproducen letras de canciones con contenidos machistas de distintos estilos, pero sobre todo de reggaetón. Canciones como «quiero una mujer bonita, callada, que no me diga nada, que cuando me vaya por la noche y vuelva por la mañana, no me diga nada» de Cali y el Dandee, o «estoy enamorado de cuatro babys, siempre me dan lo que quiero, chingan cuando yo les digo y nunca me ponen peros», de Maluma.

Aunque también hay temas entonados por mujeres en los que se dicen cosas como «cuando le dije que había sido infiel, me pegó y yo lo sentí como un beso, me pegó y entendí que realmente me quería», «por amor me entrego, por amarte sería capaz de todo sufrimiento» o «yo cocinaré, yo limpiaré, serás mi jefe y te respetaré».

Una vez escuchadas, los alumnos de Bachillerato de Artes Escénicas, Música y Danza y del Ciclo Superior de Fotografía de la Escuela Cruz Novillo de Cuencua se preguntan, entre otras cosas, por qué estas letras te suenan bien cuando en tu día a día rechazarías que alguien utilizara este lenguaje.

Durante los tres minutos que dura el video, su objetivo es dejar claro que son «canciones que consumes, que cantas, que bailas». «Lo importante no es el envoltorio, es el mensaje. Mensajes que llegan a millones de personas plagados de tópicos machistas, que nos humillan, nos denigran y nos cosifican. Que no te confundan, que no te lo adornen. La música es cultura y en la cultura no cabe el machismo y ahora tú decides, ¿cómo te suena?».

Mensaje subliminal

La campaña ¿Cómo te suena? ha tenido una gran recpercusión porque pone de manifiesto el machismo de algunas canciones que escuchan los jóvenes, además de incidir en la importancia de que todos los mensajes que nos llegan, nos afectan, aunque no nos demos cuenta.

La música tiene una gran influencia en la vida de las personas y especialmente de los más jóvenes. Por un lado, la música es muy importante para los adolescentes, puesto que construyen su identidad gracias a la diversidad de estilos que existen. Es algo con lo que se identifican, como el tipo de vestimenta o el peinado.

Por otro lado, se trata de un recurso que apela directamente a las emociones. Los adolescentes creen escuchar una canción con un ritmo que les gusta, pero en realidad el mensaje se graba de manera inconsciente en su cerebro. El cerebro humano es como una máquina que puede atender entre siete u ocho estímulos al mismo tiempo, pero el resto de señales que le llegan las graba nuestro piloto automático, es decir, se meten en nuestra cabeza sin que nos demos cuenta de ello, de forma subliminal

Además, cuanto más sutil es el mensaje más cuesta diferenciarlo, ya que nuestro cerebro es mucho más receptivo a los mensajes indirectos que a los directos.

A la larga, la música influye de manera muy potente en nuestra conducta y en nuestras actitudes. Un buen ejemplo de ello es el uso que se hace de ella en anuncios publicitarios, en las tiendas de ropa o en los centros comerciales, donde sin que nos percatemos de ello, las canciones que escuchamos, el tipo de ritmos y melodías, nos incitan a que compremos.

Muchas veces no nos paramos a pensar la letra y la música de las canciones que escuchamos, simplemente las cantamos y las repetimos.

Por eso, tal y como han hecho los alumnos de Cuenca en el video ¿Cómo te suena?, lo ideal es pararse a reflexionar sobre lo que escuchamos y tratar de extraer el mensaje que nos transmiten esas canciones.