LA MEDALLADE AZNAR

Vaya, vaya con el líder moral e incorruptible. Mira por donde, resulta que nos costó una pasta que el señor Aznar recibiera la medalla del Congreso de los Estados Unidos. El "carismático" presidente del PP dijo hace ocho años que llegaba al gobierno para regenerar el sistema de corrupción del PSOE, pero dos legislaturas después ha salido cargado de descrédito y ha dejado una herencia que tal vez su partido tarde mucho tiempo en superar. Aznar sigue empeorando día a día (ahora resulta que no se llevó los informes del CNI cuando hace una semana declaró que los tenía), pero las gentes que gobiernan en el PP se empeñan en perseverar en el error y en mantener una fidelidad absurda al líder desprestigiado y vacío. Así, ellos solos se bastan para convertir a un señor tan normalito como el presidente Rodríguez Zapatero en un verdadero campeón de la democracia. Es evidente que la mayoría de los premios, medallas, distinciones y condecoraciones varias son cuestión más de tener amigos en los organismos y jurados que deciden su concesión que de los méritos objetivos de los condecorados, y que este absurdo circo mediático que nos rodea necesita de este tipo de actos hipócritas. Pero en este caso se ha sobrepasado el límite de lo razonable porque con dinero de todos los contribuyentes se ha pagado millón y medio de euros para que el señor Aznar se cuelgue una medalla. A espera de lo que diga un juez, me parece que esa práctica se llama malversación de fondos y que en el Código Penal constituye motivo de delito. Veremos.

*Profesor de universidad y escritor