A pesar de que en los últimos tres días ha habido varios rebrotes del dichoso virus en su variante india, de que han aumentado los contagios a causa de macrofiestas descontroladas, botellones multitudinarios y concentraciones varias (¿dónde estará la Policía en estas ocasiones en las que se incumplen tan flagrantemente las normas?) y de que la incidencia parece que crece, desde ayer ya no es obligatorio el uso de mascarillas en exteriores, y siempre que se respete la distancia física.

El Gobierno de la nación debe creer, o al menos así lo parece, que administra un país en el que el cien por cien del personal indígena y todos los turistas foráneos son responsables y cumplen las normas contra el virus.

Al parecer, los ministros y su presidente no ven los informativos de las televisiones, que día sí día también emiten imágenes de miles y miles de personas saltándose las normas de prevención sanitaria. Y si eso ha ocurrido hasta ayer, imaginen lo que va a pasar ahora que las medidas se relajan al no ser obligado usar las mascarillas en exteriores.

Supongo que el Ministerio de Sanidad asume la responsabilidad por lo que ha hecho, y también todos los miembros del Consejo de Ministros por aprobar su propuesta, y que si en una o dos semanas se disparan los contagios y se producen algunos fallecimientos, la señora ministra, que cada vez que habla dibuja una extraña y nerviosa sonrisa, dimitirá por lo que, a priori, parece una clara irresponsabilidad, como han avisado la mayoría de los expertos en pandemias.

Según parece, el Gobierno tiene flaca memoria, y ya no recuerda que hace justo un año su presidente, que más que falta de memoria carece de coherencia (dejémoslo ahí), pronunció aquella insensata frase de «Hemos vencido al virus», y animó al personal a vivir un verano normal.

La consecuencia de semejante insensatez fue un aumento de contagios, de hospitalizados y de fallecidos.

Tampoco aprende este Gobierno, y anda que no tiene cosas que estudiar, de la experiencia del Gobierno de Israel, que con mucho mayor porcentaje de vacunados que en España, permitió quitarse las mascarillas, incluso en interiores, hace unos días, y ya ven el resultado: marcha atrás y un mes de nuevas restricciones.

De modo que hagan caso a los expertos, que son los que saben, sean responsables durante este verano y pásenlo bien sin que peligre su salud ni la de los demás.

Esta columna también se va de veraneo hasta el primer domingo de septiembre. Espero verlos a todos a la vuelta. Cuídense y no me falten.