Lejos de la promoción y con mucha renta sobre el descenso, Juan Ignacio Martínez se esfuerza en mantener la tensión de este Real Zaragoza en las nueve jornadas que restan para intentar una hazaña demasiado improbable, pero factible numéricamente. Ya dijo Zapater el martes que él mientras quedaran puntos no daba la temporada por perdida y en eso insiste JIM. “No puedo estar más de acuerdo con el capitán. Defendemos el escudo, queremos cobrar y ojalá sumemos muchos puntos y nos dé para estar peleando. Quedan muchos puntos, nuestro margen de error es mínimo por no decir ninguno y tenemos que intentar sumar lo máximo posible para ver hasta dónde nos llega”, insiste el entrenador, para después remarcar su discurso: “El escudo es el que es y todos sabemos que ahora nos jugamos muchísimo en estas alturas de temporada con partidos que son finales”.

“El escudo es el que es y todos sabemos que ahora nos jugamos muchísimo en estas alturas de temporada con partidos que son finales”

De momento, la próxima final es ante el Tenerife el sábado, un rival que llega en puestos de promoción, pero que ha caído en el ritmo, con solo una victoria en cinco partidos y cuatro derrotas que le han frenado. “Es un candidato total al ascenso y sobran motivaciones añadidas para este encuentro. Pese a la mala racha actual mantiene una regularidad muy grande y te castiga mucho los errores. Es un partido que tenemos que jugar con dos marchas”, asegura JIM, que sabe que su equipo llega tras un punto de seis en Liga, tras la derrota en Cartagena, que “sí fue un poco grosera”, y el empate en La Romareda ante el Amorebieta: “Cuando no ganas por supuesto que estás enfadado. El último partido fue un pasito atrás, aunque en los 90 minutos fuimos merecedores de la victoria y salvamos un punto en el último segundo, pero queríamos los tres”.

“¿Azón? Si lo pongo es porque me lo habéis dicho y si no es que soy un sieso. Dije que merecía ser titular, dejadme que llegue al partido y ahí se verá la decisión"

Con esa mentalidad, sin mirar el futuro más allá del Heliodoro, que dibuja al Girona y el derbi contra el Huesca, JIM tiene que decidir sobre una titularidad de Iván Azón que consideró tras marcar ante el 'Amore' el quinto tanto en seis partidos que merece. Todo apunta a que se la dará, aunque volvió a no dar demasiadas pistas. “Si lo pongo es porque me lo habéis dicho y si no es que soy un sieso. Iván ya dice que él está para ayudar en lo que haga falta, para nosotros por encima de salir en el once es un jugador muy importante. Dije que merecía ser titular, dejadme que llegue al partido y ahí se verá la decisión. No me gusta personalizar y meter más presión, pero en el fútbol son muchos factores, hay once que salen de inicio y los que ayudan después”, explica.

Mientras, uno de sus compañeros de ataque, Álvaro Giménez, aseguró el miércoles que “es posible que jugando con otro delantero me sienta más cómodo. Hay veces que tanto yo, como Sabin Merino o Azón estamos bastante solos”, JIM no quiere polemizar sobre su apuesta ofensiva, ya que “el otro día estaban en el campo Nano, Iván y Álvaro, tres delanteros. Buscamos los espacios con la amplitud en el campo y para el remate entran por dentro. El jugador lo que quiere es marcar muchos goles, no he escuchado al chico, no tengo una opinión. A lo mejor no quiere decir eso exactamente, ya se lo preguntaré", sentencia el entrenador, que recalca que su Zaragoza juega siempre con dos delanteros de inicio.

La citación del filial

Por último, JIM tendrá en cuenta el decisivo partido en la batalla por subir del Deportivo Aragón ante el Utebo a la hora de conformar la convocatoria, para la que recupera a jugadores como Francho, Bermejo y, probablemente, a Francés. “Predomina en la decisión el Zaragoza, pero con el míster del filial tengo una gran relación por esa subida de los chavales y sé que es una semana importante. Si nosotros recuperamos y tenemos variantes y estructura en el equipo intentaremos que tenga el filial la disponibilidad de la plantilla, pero a expensas de ver qué futbolistas tenemos para llevarlos o no”.