REAL ZARAGOZA

El extraño caso de Borja Sainz en el Real Zaragoza

El delantero no ha encontrado la continuidad con JIM y el técnico lo sustituyó en Eibar tras haber entrado en el descanso

Borja Sainz celebra su gol frente al Sporting en La Romareda.

Borja Sainz celebra su gol frente al Sporting en La Romareda. / JAIME GALINDO

El episodio de Eibar, ser cambiado tras haber entrado en el descanso, fue el más llamativo de todos por lo poco usual de esa práctica sin lesión de por medio, pero lo cierto es que Borja Sainz no ha terminado de convencer a JIM en toda la temporada, ni siquiera con goles. El punta vizcaíno ha participado en 31 de los 38 partidos disputados, solo en 15 ha sido titular y no ha completado ninguno de ellos.

La situación más particular fue la del pasado fin de semana. JIM dio entrada a Borja Sainz al inicio de la segunda parte en lugar de Bermejo buscando una mayor presencia zaragocista en ataque. Pero la segunda mitad del equipo fue aún peor que la primera y el Zaragoza resultó inofensivo, más aún tras los goles locales, lo que no gustó en absoluto al entrenador porque llovía sobre mojado.

El técnico podía haber quitado prácticamente a cualquier futbolista de los que estaban en el césped, pero en el minuto 78, 33 después de haber entrado, retiró a Borja Sainz para dar entrada a Puche. Preguntado en rueda de prensa, JIM se limitó a responder que había sido “decisión táctica”. Se trató de un aviso a navegantes. Tras la decepcionante actuación ante el Burgos y viendo que sucedía lo mismo en Ipurua, el técnico escenificó así la exigencia que quiere imponer a su equipo en esta recta final de temporada.

El elegido fue Borja Sainz, cuya presencia en el equipo ha sido irregular toda la temporada. Comenzó el curso siendo suplente, entrando en los tramos finales de los seis primeros partidos. Al séptimo fue titular por primera vez, en Lugo, y lo celebró marcando su primer gol de la temporada. Desde el punto de penalti empató el duelo cuatro minutos después de que se adelantaran los locales y el Zaragoza sacó un punto del Ángel Carro (1-1).

Sin embargo, después de estrenarse como goleador en un equipo con escasez en esa faceta, Borja Sainz vio desde el banquillo los dos siguientes encuentros, frente al Oviedo y el Huesca en La Romareda. Al siguiente disputó la segunda parte en Málaga. Su participación siguió siendo escasa, con una sola titularidad en los siguientes cuatro encuentros. Volvió a estar en el once en la jornada 15 frente al Sporting en La Romareda. Y volvió a marcar.

Adelantó al Zaragoza a la media hora de juego y el equipo ganó por 2-0. Esta vez JIM decidió darle continuidad y volvió a ser titular la siguiente jornada en Las Palmas. Pero solo jugó hasta el descanso. Después volvieron las intermitencias en su participación con el equipo hasta que brilló en la Copa frente al Sevilla. Aunque el Zaragoza fue eliminado, Sainz fue el más destacado en un partido en el que exhibió su velocidad y capacidad de regate.

Pareció la definitiva porque desde entonces fue titular en cinco jornadas consecutivas, pero de nuevo pasó a disputar los minutos finales ante Las Palmas y Sporting y a no tener ninguno frente a Almería y Fuenlabrada. Tras la dura derrota en Cartagena (3-0) JIM lo recuperó para el once contra Amorebieta, Tenerife y Girona, cuando marcó uno de los goles de la temporada al definir de vaselina un contraataque.

Esta vez no pudo jugar el siguiente partido porque, estando ya en el banquillo en el duelo contra el Girona, vio la quinta cartulina amarilla al tirar el balón a la grada para perder tiempo. No obstante, JIM le dio continuidad frente al Burgos pero tras la mala actuación del equipo el técnico hizo cambios en Ipurua y, uno de ellos, fue Borja Sainz. En Eibar se escribió el último capítulo de esta historia de desencuentro entre el futbolista y el técnico.

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