A veces un pequeño gesto tan sencillo como hacer una captura de pantalla en el ordenador se nos puede atragantar. O eso o simplemente jamás hemos necesitado realizar una y cuando llega el momento nos vemos en la obligación de aprender cómo se hace. Pues vas a ver que es fácil y que no cuesta absolutamente nada.
Os vamos a presentar dos métodos muy sencillos para Windows, pero los dos muy fáciles y no vas a necesitar más de medio minuto para cada uno de ellos.
Usar la herramienta recortes
Quizá no habías reparado en ella, pero está instalada de forma predeterminada en el ordenador y solo debes buscarla en él. Una vez abras la aplicación solo deberás seleccionar el modo, que puede ser libre, rectangular, de ventana o la pantalla completa. Nosotros te recomendamos, en función de sus necesidades, el libre o el rectangular, porque así ya dejamos la imagen lista para enviar sin tener que editar nada.
Una vez tengas ya lo que quieres, guarda la imagen y ya está. Sencillísimo y sin más complicación.
Con el Paint
Otra aplicación preinstalada en nuestro equipo y de las que más hemos usado a lo largo de todos estos años. El proceso tiene más pasos pero no es nada difícil. Para hacer la captura busca en tu teclado la tecla "Impr Pant" y púlsala.
Lo siguiente es abrir el Paint (aunque también se puede con Word, Powerpoint, etc.) y pegar la captura con "Control + V" o botón derecho y pegar.
Ya tendremos la imagen dentro de un editor que nos permitirá recortar los bordes , añadir texto o cualquier cosa que necesitemos. Una vez ya la tengas lista, guárdala y ya está. De todos modos ten en cuenta que a partir de Windows 10 ya no hay Paint, así que deberás tirar por la otra opción.