Polvo: "Conjunto de partículas diminutas que flotan en el aire y se depositan sobre los objetos formando una capa de suciedad", dice la RAE. O dicho de otro modo, una verdadera lata, un engorro, un enemigo natural. Lo quitas y vuelve a aparecer o más bien jamás se fue.

El polvo es muy difícil de quitar. Se va a acumulando, va creando una capa de suciedad que además por todos lados que acabamos incluso esparciendo hasta el infinito y más allá. Como mínimo hay que quitarlo un par de veces por semana para tener un hogar limpio y evitar problemas respiratorios, que se pueden ocasionar por el exceso, y sobre todo para evitar alergias, que son mucho más comunes y que también tienen la particularidad de ser excesivamente molestas.

Para quitar el polvo siempre se ha solido usar un plumero. Bien uno con plumas más al uso o el clásico de todas las casas de distintos colores vivos. También una especie de mopa, un producto líquido para que se quede en la bayeta... Pero dependiendo de qué y cómo se use se acaba simplemente moviendo de un lado para otro.

Pero no te apures, ya que con una sencilla combinación de ingredientes que todos tenemos en casa o que son muy fáciles de conseguir se logrará crear una fórmula mágica y eficaz que acabará con el polvo.

En spray

Para ello necesitarás, lo primero, una bayeta de microfibra, que son muy útiles para atrapar la suciedad y que puedes encontrar en cualquier supermercado de forma bien sencilla.

Y después, unir los siguientes ingredientes en cualquier recipiente que se pueda rociar como un spray. Es decir, que lo mejor es que guardes la botella de cualquier pulverizador de limpieza para reutilizarlo. Ahí junta dos tazas de agua, un cuarto de vinagre blanco de limpieza, dos cucharadas de postre de aceite de oliva y, por último, usa media cucharada de aceite esencial, el que más te guste, para contrarrestar sobre todo el fuerte olor del vinagre. El de limón quedará ideal, pero también otros olores.

Para usarlo no hay nada más que rociar y esperar unos pocos minutos a que haga efecto en los muebles y en las zonas de las que quieres quitar la suciedad. Después, solo queda pasar el paño de microfibra y otro paño seco para que quede espectacular. El vinagre limpia y desinfecta, el aceite de oliva abrillanta, el aceite esencial da buen aroma y todo ello, en su conjunto, consigue atrapar el polvo.