A la hora de perder peso y de quitarnos esos kilos de más suelen salir a la palestra de primeras algunas ideas. Una de las clásicas, empezar a comer todo a la plancha o apostar más por las verduras. Y en cuanto al ejercicio físico, mucha gente se pone a correr, pero lo que verdaderamente cuesta es que haya constancia. Nos cuesta empezar, nos cansamos, nos agotamos y acabamos dejándolo y optando por otras opciones o por no hacer nada. Y vuelta a la casilla de salida.

Como ya te hemos contado muchas veces no hay mayor secreto para perder peso y calorías que ponerse en manos profesionales, llevar a cabo una dieta sana, rica, variada y equilibrada, evitar alimentos que solo deberían ser esporádicos y hacer ejercicio físico, aunque sea en la medida de nuestras posibilidades. Puede hacer más un paseo de una hora que correr diez minutos, por ejemplo.

Pero también se pueden aplicar varios trucos que nos ayudarán en esta tarea. Uno de los más clásicos y efectivos es tomar bebidas saciantes, como por ejemplo tés, y comidas con fibra que nos llenen el estómago, lo que hará que tengamos menos hambre y no piquemos entre horas nada que no sea saludable.

30 minutos bastarán

Y a esta lista de trucos se suma uno que te puede parecer algo inverosímil, pero que es efectivo, tal y como asegura un grupo de investigadores de la Universidad de Loughborough, en Reino Unido.

Según este estudio, darse un baño de agua caliente durante 30 minutos quema las mismas calorías que media hora corriendo. Ahora bien, aunque puede ser una ayuda no deberías fiar a este truco tu pérdida de peso ya que es mucho más sano correr. Fortalece el sistema cardiovascular, mejora la capacidad física y libera endorfinas, por lo que es un ejercicio muy indicado para adelgazar.

Ahora bien, como ayuda si has tenido un día muy estresante, como método si es tu día de descanso o si simplemente ese día no te apetece hacer ejercicio puede servir.

Siempre se ha hablado de los beneficios de las duchas y baños de agua fría, ya que mejoran la circulación, pero según este estudio, más allá de la quema de calorías, el agua caliente ayuda a prevenir la diabetes tipo 2, además de mejorar el sistema cardiovascular e inmune.

Lo ideal es hacer el combo perfecto, que es dieta sana, ejercicio físico y baño de agua caliente. Así conseguirás adelgazar sin problema y quitarte esos kilos que te sobran.