Este es el secreto que desconocías de la freidora de aire

Con este truco conseguirás sacar el máximo partido a este electrodoméstico

Freidora de aire

Freidora de aire / El Periódico de Aragón

Platos más saludables, más pequeño que un horno, cocinar sin apenas aceite, diversidad de recetas para elaborar, más rapidez en el proceso de cocinado, menor consumo en la factura de la luz...Estas son algunas de las ventajas que debemos de tener en cuenta a la hora de adquirir una freidora de aire.

Desde que la airfryer, también conocida como freidora de aire, empezó a popularizarse, son muy pocas las personas que se han privado de añadir este electrodoméstico a la cocina de su casa. Muchos la definen como un pequeño aparato que llega para facilitarte la vida.

Normalmente, si compras una freidora de aire sabes que se puede cocinar casi todo tipo de alimentos en este electrodoméstico, además de leerte las instrucciones o buscar en internet trucos y curiosidades para saber qué otras funciones tiene este utensilio. Sin embargo, el secreto que muchos desconocen es que además de cocinar, la freidora también puede descongelar alimentos en su interior, como el pan.

Cómo descongelar el pan en la freidora de aire

La freidora de aire es el mejor electrodoméstico para descongelar alimentos como el pan. ¿Por qué? Porque reduce al máximo el agua, por lo que no afectará tanto su estado, y porque el pan queda en su punto. 

Pero, ¿qué modo, tiempo y temperatura debemos poner? Lo primero que tienes que hacer es precalentar la freidora de aire. Una vez hecho esto, colocas el pan de manera que el aire pueda moverse con facilidad.

Ahora, solo tienes que poner máximo 10 minutos a una temperatura baja, en función del tipo o grosor del pan, y controlar cada pocos minutos cómo va el proceso para ir aumentando la temperatura poco a poco a 180º. Si sientes que no está completamente descongelado, puedes esperar unos pocos minutos más hasta que compruebes que está listo para consumir. 

De esta forma conseguirás descongelar el pan, calentarlo y dar ese toque crujiente por fuera y blandito por dentro, como recién salido de la panadería.