ZARAGOZEANDO

El regreso de la fiebre ‘banderil’ a los balcones de Zaragoza

"El domingo –coincidiendo con la manifestación en la calle Alfonso– sí que vendí muchas", cuenta el empleado de un establecimiento

Banderas de España y de Ara´gon en los balcones del edificio que hay en la plaza de la Delegación del Gobierno.

Banderas de España y de Ara´gon en los balcones del edificio que hay en la plaza de la Delegación del Gobierno. / Laura Trives

Iván Trigo

Iván Trigo

Fue en plena ebullición del procés catalán cuando los balcones se convirtieron en el canal principal de expresión de los españoles. Las terrazas de una buena parte del país se llenaron de banderas de España mostrando su rechazo a la intentona independentista, mientras que en Cataluña las esteladas se colgaban para apoyar el referéndum del 1 de octubre de 2017.

Con la presentación de la ley de amnistía y la investidura de Pedro Sánchez, hay algunos de los que habían quitado las enseñas nacionales que las han vuelto a poner, por si había algún despistado que no sabía que Zaragoza sigue siendo parte de España. No obstante, no han sido muchas las nuevas banderas las que se han colocado.

La mayoría llevan años ondeando en las barandillas de la ciudad. Algunas ya han perdido lustre y amarillean. Por eso hay quien ha visto una oportunidad de negocio en el resurgir del españolismo banderil: los bazares y tiendas de todo a cien. Estos días muchos de estos comercios han ocupado estanterías enteras con la enseña nacional, a sabiendas de que las manifestaciones convocadas por el PP y Vox iban a suponer un aumento de la demanda de las telas rojigualdas. "El domingo –coincidiendo con la manifestación en la calle Alfonso– sí que vendí muchas. Estos días menos pero todos los días alguien viene", cuenta Roberto, que trabaja en un HiperZaragoza.

ABOGADOS

La cuatribarrada también se suma a los balcones

La fiebre banderil va por barrios. Hay distritos, como el de Universidad –casualmente uno de los que tiene las rentas más altas de la ciudad– en los que estos días sí que se han visto más banderas españolas en los balcones. Y hay quien decide acompañar la bicolor con la cuatribarrada aragonesa. Después del procés, el covid fue otro momento en el que la expresión de balcón cobró protagonismo.

Las barandas se llenaron entonces de mensajes de apoyo a los sanitarios y lemas como el famoso Todo saldrá bien. Otros colocaron la bandera nacional con un crespón negro para recordar a las víctimas y, de paso, criticar las restricciones impuestas por el Gobierno de España para frenar la expansión de la pandemia. La bandera de España para criticar al Gobierno de España.

Hay banderas de todos los formatos.

Hay banderas de todos los formatos. / Laura Trives

Banderas de todos los colores

La instrumentalización y apropiación de la enseña nacional, eso tan propio de la derecha patria. Pero el rojo y el amarillo no son los únicos colores que se ven en las terrazas de Zaragoza. La bandera arcoíris del colectivo LGTBI también ondea en muchas de ellas. En la Magdalena, en un balcón de la calle Don Juan de Aragón, hay una enseña de la URSS.

Y durante los últimos tiempos, con la polémica sobre la construcción de un telecabina a través de Canal Roya, también se han visto muchas pancartas contra el proyecto con el rostro de la vaca Anayeta. Y si de ecuanimidad se trata hay que hablar de El Pequeño Catalán, la tienda de telas y trajes situada en César Augusto. En su escaparate exhiben la tricolor republicana, la bandera LGTBI, la de Zaragoza, la de Aragón, la de España y hasta la de la Comunidad de Madrid. Todas las Españas tras la misma cristalera.

Un balcón del Actur con una bandera feminista, la LGTBI y la de Aragón.

Un balcón del Actur con una bandera feminista, la LGTBI y la de Aragón. / EL PERIÓDICO