iNFRAESTRUCTURAS EN ZARAGOZA

Los técnicos analizarán 40 puntos del Coso y San Miguel en busca de restos arqueológicos antes de su reforma

El proyecto de reforma integral de este entorno dependerá de los vestigios arqueológicos que aparezcan

Los primeros trabajos van a comenzar en abril y seguirán durante el verano

La reforma de la plaza San Pedro Nolasco acaba en el cajón dos años y medio después de anunciarse

Por la plaza San Miguel de Zaragoza pasan 11 líneas del servicio del bus.

Por la plaza San Miguel de Zaragoza pasan 11 líneas del servicio del bus. / ÁNGEL DE CASTRO

Iván Trigo

Iván Trigo

La reforma de la céntrica plaza San Miguel y de la calle del Coso, en Zaragoza, no va a ser sencilla. La zona es un importante eje para la movilidad de la capital aragonesa y, además, por su situación en el mapa de la ciudad, se espera que en las excavaciones puedan salir a la luz restos arqueológicos que condicionarán las obras. Por ello, antes de redactar el proyecto de obras, se van a realizar 40 catas del subsuelo para comprobar qué hay bajo la calzada y si merece la pena conservarlo de alguna manera.

Las catas se van a realizar por fases puesto que también tienen su complejidad. Las primeras se van a llevar a cabo antes de que acabe este mes de abril en la plaza San Miguel y su entorno, mientras que en el Coso se van a retrasar hasta verano para intentar que las afecciones al tráfico sean mínimas, ya que el número de coches en circulación disminuye mucho en periodo estival.

Las catas arqueológicas van a implicar que se abran 40 agujeros en el firme que van a tener dos metros de largo por dos de ancho y dos de profundidad, por lo que las afecciones serán considerables. No se harán todas a la vez, precisamente, para evitar problemas de calado tanto para los viandantes como para el tráfico.

En estos momentos, los técnicos municipales encargados de los sondeos ya han marcado los puntos en los que deberían realizarse esas catas, pero los servicios de Movilidad e Infraestructuras todavía tienen que estudiar cómo se van a llevar a cabo las excavaciones para minimizar las afecciones.

«Estamos en una zona de la ciudad en la que seguro van a salir restos arqueológicos y van a ser esos restos los que condicionen, por su importancia y por su emplazamiento, el proyecto de urbanización y el trazado de las redes de saneamiento», explicó este lunes el concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, en la comisión de su área.

Una decisión "firme"

«La decisión de acometer esta obra es firme, pero no puedo avanzar nada sobre el proyecto», mencionó también Serrano ante las preguntas del concejal de Vox Armando Martínez.

Y es que el diseño de la plaza dependerá de los restos que aparezcan en el subsuelo. Y pueden no ser pocos. La iglesia de San Miguel de los Navarros se construyó cerca de un convento que ya no existe pero del que podrían salir a la luz restos de los cimientos. Y qué decir del Coso, antiguo límite de la ciudad romana y por donde transcurría la muralla romana. Además, en todo lo que es hoy el entorno del seminario de San Carlos Borromeo, entre el Coso y la calle San Jorge, estaba situada la judería de la ciudad.

Una vez se realicen las catas, la intención del Ayuntamiento de Zaragoza es comenzar a redactar el proyecto de reforma a finales de este año, pero todo dependerá del resultado de las excavaciones y de la dificultad que entrañe respetar los restos arqueológicos que aparezcan.

11 líneas de bus

El objetivo a priori es mejorar la escena urbana en esta zona de la ciudad, que sirve de entrada al Casco Histórico desde el este. No obstante, por la plaza San Miguel pasan hoy en día 11 líneas de autobús urbano, a lo que tendrá que darse también una solución desde el punto de vista de la movilidad si lo que se busca con las obras es dotar de más espacio al peatón. «El criterio que se va a seguir es agrandar y mejorar la accesibilidad y el confort en las zonas peatonales», explicó Serrano.

Una empresa externa se hará cargo del proceso topográfico, que no saldrá a licitación. Lo que está por ver es el coste del proyecto de redacción, que se pagará con cargo a la partida del plan de renovación de avenidas, que cuenta con 500.000 euros este año.

En la comisión de Urbanismo, desde Vox, socio prioritario del PP en el Gobierno municipal, apoyaron la decisión de la alcaldesa de reformar el Coso y la plaza San Miguel. «Es caótica, está algo anticuada y es cierto que no es muy amigable con los peatones», afirmó Martínez, despejando así el camino a Natalia Chueca para poder acometer esta obra. No obstante, el edil de la ultraderecha advirtió: «Nos genera alguna duda lo que ustedes puedan estar pensando a la vista de lo que hemos visto en otras plazas como Salamero».

Sin reforma integral en San Pedro Nolasco

El concejal de Urbanismo, Víctor Serrano, confirmó este lunes que no está previsto acometer una reforma integral de la plaza San Pedro Nolasco, una obra que prometió Jorge Azcón siendo alcalde y para la que se encargó la redacción del proyecto, cuya ejecución iba a suponer una inversión de unos 800.000 euros. El motivo para no llevar a cabo estos trabajos, dijo Serrano, es que «no suscita consenso entre los vecinos» . «Sí que está previsto que podamos atender defectos puntuales en la pavimentación», dijo también.  

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