UN PROYECTO ESTRATÉGICO

Construir La Romareda en una sola fase ahorrará entre 4,5 y 6 millones de euros

La sociedad Nueva Romareda se ha decidido ya y levantará un estadio modular en el Parking Norte de la Expo en Zaragoza, lo que permitirá ahorrar tiempo en la construcción del nuevo estadio

Las obras se licitarán conforme a los costes objetivos y con una fórmula que impedirá incrementos de costes inesperados una vez hayan comiencen los trabajos

Reunión de la junta de portavoces del Ayuntamiento de Zaragoza, este lunes.

Reunión de la junta de portavoces del Ayuntamiento de Zaragoza, este lunes. / AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA

Iván Trigo

Iván Trigo

Ya es oficial. La Romareda se levantará en una sola fase y el Real Zaragoza se mudará a un estadio modular en el Parking Norte de la Expo a partir de agosto de 2025, donde jugará el club blanquillo hasta que terminen las obras del nuevo estadio. Así lo decidió la sociedad mixta encargada de construir el campo de fútbol -conformada por el ayuntamiento, la DGA y el club- la semana pasada y así se lo han comunicado este lunes a los portavoces de todos los grupos municipales en el consistorio.

Según ha explicado el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza y consejero de la sociedad Nueva Romareda, Víctor Serrano, la decisión se ha tomado conforme a unos "borradores" que todavía no son definitivos, pero que apuntan a que acometer las obras en tan solo dos fases y no en cinco como se había previsto hasta ahora ahorrará costes de construcción. Esto mismo lo avanzó ya la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, en una entrevista con este diario ese pasado domingo.

En concreto, ese ahorro podría estar entre los 4,5 y 6 millones de euros con respecto a los 148,5 millones que constan en el proyecto básico de las obras. Sin embargo, el precio definitivo del nuevo estadio no se conocerá al detalle hasta finales de junio, cuando Idom, la consultora encargada del diseño del estadio, entregue el proyecto de ejecución del campo.

Así, según ha avanzado Serrano, el cronograma previsto en estos momentos es el siguiente: el próximo 8 de julio comenzará la primera fase de las obras, en la que se procederá al derribo de la grada del Gol Sur, el edificio de la antigua Gerencia de Urbanismo y del Cubo. También se construirán ya los cimientos del sótano situado bajo el graderío que va a desaparecer y del que la afición zaragocista podrá despedirse el próximo domingo en el partido entre el Real Zaragoza y el Albacete. Ese será el último partido en el que La Romareda luzca tal y como la conocemos.

Este mes de agosto, cuando comience la temporada, el club volverá a jugar en La Romareda, pero el Gol Sur ya no estará disponible para los aficionados, por lo que el Zaragoza tendrá que haber diseñado ya el plan para recolocar a sus abonados. Esta primera fase de las obras terminará en el mes de diciembre.

El 'plan b' se confirma como 'plan a'

Para entonces se habrá licitado ya la segunda fase -y última- fase de las obras, que consistirá en la demolición de los otros tres graderíos y en la construcción del nuevo estadio. Esto se hará de una vez y no en cuatro fases como hasta ahora. Según el proyecto básico, que ya se ha ordenado modificar, el club iba a poder seguir jugando en el estadio en obras y se iban a aprovechar los veranos, cuando la competición futbolística descansa, para derribar cada una de las tribunas, a razón de una grada por temporada. Ese planteamiento ya es historia.

Así, se confirma el plan que adelantó EL PERIÓDICO DE ARAGÓN hace ya varias semanas que pasa por la construcción de un campo de fútbol modular en el Parking Norte donde el Zaragoza jugará para permitir que las obras en el nuevo estadio avancen más rápidamente. Esta opción, ha dicho este lunes Serrano, también lleva aparejadas otras ventajas, como el ya mencionado ahorro en los costes, así como también la posibilidad de acometer los trabajos con una mayor garantía de seguridad.

Víctor Serrano, este lunes en rueda de prensa, para dar cuenta de los acuerdos sobre La Romareda.

Víctor Serrano, este lunes en rueda de prensa, para dar cuenta de los acuerdos sobre La Romareda. / AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA

A ese ahorro de entre 4,5 y 6 millones podría sumarse la baja en las ofertas de las empresas que se presenten al concurso para construir el nuevo estadio que, "siendo conservadores", afirmó Chueca en este diario, podría rondar un "10%" del presupuesto base de la licitación. Hay que tener en cuenta que, en la primera fase de las obras, la que comenzará este 8 de julio, se ha conseguido ahorrar un 25% de lo presupuestado inicialmente: los derribos se licitaron por 4,1 millones de euros y se han adjudicado por 3,1 millones.

Estos ahorros, eso sí, se verán compensados por el aumento del gasto que supondrá la construcción del estadio modular en el Parking Norte de la Expo, cuyo coste, ha avanzado Serrano, ascenderá hasta los 8 o 10 millones de euros. Este campo de fútbol portátil tendrá que estar listo en agosto de 2025

Licitación "por costes objetivos"

Por otro lado, el concejal de Urbanismo ha explicado que, en la licitación de las obras de construcción del estadio, esa segunda fase que seguirá a la de los derribos, se va a hacer "por costes objetivos", lo que implicará la imposición de una fórmula que permitirá calcular en función del coste, los precios y el margen de beneficio posibles modificaciones en el proyecto del estadio.

Esto garantizará que, en caso de que haya que aumentar el presupuesto de las obras por causas sobrevenidas -como podría ser la inclusión de nuevos requisitos de la FIFA- el coste de las modificaciones se calcule según una fórmula establecida de antemano para evitar que la empresa adjudicataria pueda aumentar su beneficio de forma injustificada. Así se elimina también la posibilidad de judicializar los desacuerdos que puedan surgir entre el contratista y el contratado y también una paralización de los trabajos. Todo quedará escrito de antemano para que no haya sustos.

Con todo, la previsión en estos momentos es que la nueva Romareda pueda estar terminada entre finales de 2027 y principios de 2028, un año antes de lo estipulado inicialmente.