La DGA todavía no ha comunicado oficialmente al Gobierno central su rechazo a la bilateral

Lo deslizó el presidente Azcón este martes por la mañana, lo confirmó el Ejecutivo por la tarde y este miércoles, de nuevo, ha sido Mar Vaquero, la vicepresidenta segunda de la DGA, la encargada de reiterar que no van a participar en un "acto electoral", en relación a la bilateral propuesta por el Gobierno central tras la crisis política provocada por el informe de la ONU sobre la derogación de la ley de memoria.

Azcón planta al Gobierno de España y no acudirá a la bilateral

Vaquero ha definido como "ocurrencia" la convocatoria de este encuentro, que tacha de "campaña electoral", aunque ha matizado que todavía no han dado una respuesta oficial al Ejecutivo de Sánchez, pues todavía "hay tiempo". Concretamente, hasta el día 16 de mayo. En ese sentido, el ministro de Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ya subrayó a última hora del martes que no se pronunciaría hasta la respuesta "oficial", que, por tanto, aún no ha llegado.

Aunque, eso sí, Torres reafirmó la intención del Gobierno central de recurrir al Tribunal Constitucional si eso ocurría. A ese respecto, Vaquero se ha mostrado convencida de que dicho recurso "no prosperará", porque, en la línea de lo dicho en los últimos días, la derogación de la norma fue "jurídicamente intachable". En cualquier caso, Vaquero ha reivindicado la figura de la bilateral, recogida en el Estatuto de Autonomía, aunque ha recordado que desde 2018 está siendo "imposible" celebrarla.

Tampoco parecía Vaquero muy por la labor de cambiar su decisión, incluso en el caso de que el Gobierno central incluyese en el orden del día algunas de las cuestiones requeridas desde hace tiempo desde los despachos del Pignatelli: "Si ya no es serio esta convocatoria, todavía sería menos serio que trataran de modificar la propuesta".

Por otra parte, en relación al símil realizado hace un par de días por la Delegación del Gobierno en Aragón, al calificar este encuentro de "tan bilateral" como el mantenido entre Azcón y la ministra Ribera, la vicepresidenta ha subrayado que "hay que diferenciar entre cuestiones serias que afectan al día a día de los aragoneses –el tema a tratar entonces fue el agua– y ocurrencias electorales que no responden a cuestiones útiles".

Mientras, la intención del PSOE sigue siendo la de que el presidente Azcón comparezca en el pleno para valorar el informe de Naciones Unidas. De hecho, la Mesa de las Cortes ha calificado este miércoles la petición del Grupo Socialista sobre ello. En cualquier caso, se trata de un mero trámite que deberá ser aprobado o rechazado en la Junta de Portavoces.