Los más de 200 inspectores de Salud Pública del Gobierno de Aragón serán los encargados de vigilar el cumplimiento de la nueva ley antitabaco, que entrará en vigor el próximo 2 de enero y que no permitirá fumar en ningún espacio público cerrado ni en parques infantiles.

Sin embargo, la labor de inspección del cumplimiento de la nueva norma, que se integrará en la supervisión habitual de los establecimientos sujetos a control, no comenzará hasta el lunes día 3 cuando los inspectores desarrollen su trabajo diario, informó ayer a Efe el director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Javier Falo.

El día de entrada en vigor de la ley, el primer domingo del año, no habrá ninguna inspección específica, agregó Falo, quien señaló que en los locales no sujetos a las inspecciones habituales se actuará ante las denuncias que se produzcan.

Además, el Departamento de Salud y Consumo ha iniciado una estrategia informativa sobre la norma, con la publicación del texto aprobado por el Congreso con las enmiendas en las paginas web aragonsintabaco.com, saludpublicaaragon.es y saludinforma.es, que también se podrá consultar en la web del Gobierno de Aragón.

INFORMACIÓN ACCESIBLE En esa información, que será "accesible" y "muy digerible", se intentará explicar el contenido de la ley, los cambios que se han producido, sus efectos y cómo puede afectar, además de propuestas en el caso de que se incumpla. Aunque Falo se mostró convencido de que se va a cumplir de manera general y de que quien fumaba en los espacios públicos ahora no lo hará, otros preguntarán si se puede y en el caso de que la persona no se dé cuenta el responsable del local se lo hará saber.

En su opinión, estas situaciones se resolverán en más del 90% de los casos y solo se producirán incumplimientos aislados, ya que en España de cada diez personas tres fuman y siete no. "Intentaremos que la norma se cumpla con el menor grado de conflicto" y para ello siempre que se pueda se hará un esfuerzo añadido, agregó el director general.

CAMPAÑA PARA JÓVENES En este sentido, Falo informó de que intensificarán la promoción de las campañas antitabaco y de que están trabajando en diseños de iniciativas en las redes sociales, dirigidas especialmente a los jóvenes. Esto se debe, según señaló, a que aunque ha disminuido ligeramente la deshabituación entre los adultos, en la población joven se sigue incrementado en un porcentaje excesivo y cada vez comienzan a menor edad, ya que algunos fuman a partir de los 13 años.

Sobre los servicios públicos de deshabituación tabáquica, el director general anunció que seguirán los mismos, en Zaragoza, Huesca y Teruel, algunos de ellos privados pero sostenidos con fondos públicos como los de la Universidad de Zaragoza o Cruz Roja. Falo explicó que en las últimas semanas, como es habitual en todos los finales y primeros de año, se ha incrementado la demanda en dichos servicios, unas peticiones que en esta ocasión también se pueden deber a la entrada en vigor de la nueva ley como ya ocurrió con la anterior, en 2006.

Sin embargo, insistió en que quien desee abandonar el hábito debe acudir en primer lugar a una consulta con su médico de cabecera, en Atención Primaria. Lo fundamental es "querer dejar de fumar" por convencimiento personal ya que en caso contrario no hay ningún servicio sanitario que resuelva el problema del vicio, afirmó.

ÉXITO DE LOS TRATAMIENTOS El responsable gubernamental también aseguró que más del 90% de las personas que dejan de fumar lo hace por medios propios y que los servicios de deshabituación tabáquica tienen éxito solamente en alrededor del 30% de los casos. Láser, acupuntura, hipnosis, pastillas, parches y chicles son algu

nas de las alternativas que ofrece el mercado.