Los primeros estudios para convertir en realidad la Travesía Central Pirenaica estarán listos en el 2013. Ayer se constituyó en París el Comité de Dirección de la Agrupación Europea de Interés Económico Travesía Gran Capacidad de los Pirineos. Se acordó la licitación de los informes preliminares. En este foro, en el que participaron representantes del Gobierno español y francés, además de los de otros países como Marruecos, tomó parte el presidente del Ejecutivo autonómico, Marcelino Iglesias. Estuvo acompañado por agentes sociales de la comunidad, por el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, y por la consejera de Presidencia, Eva Almunia. Todos ellos se reunieron con la patronal gala, de la obtuvieron un compromiso con el proyecto.

En la carrera de fondo que es la TCP ayer se dio un paso más. Incluso dos. La licitación de los estudios previos garantiza que el proyecto sigue avanzando, aunque lentamente, y que sobre el año 2015 podrían verse algunas obras. La agrupación de interés económico, en la que se enmarca el proyecto, cuenta con diez millones de euros --cinco de la Unión Europea y cinco de España y Francia-- para realizar los estudios. Los dos primeros que se lanzaron ayer cuentan con 500.000 euros, aunque el presupuesto anual de este organismo bilateral es de 1,2 millones. De sus conclusiones se extraerá el trazado definitivo de este paso pirenaico. Una cuestión que España y Aragón han dejado en mano de Francia, que será la que determine el trayecto definitivo.

Pero además, del encuentro de ayer la delegación aragonesa obtuvo el compromiso de la principal organización empresarial francesa. Su presidente y director general del área internacional, Jean Burelle y Philippe Gautier respectivamente destacaron la importancia de impulsar el paso por el Pirineo. A los respaldos de la parte francesa se sumaron también los del sector empresarial aragonés, que ayer participó también en esta reunión. El presidente de la CREA, Jesús Morte, subrayó que "si a alguien beneficia la travesía es al tránsito mercantil, con un desarrollo altamente sostenible". Por su parte, el presidente de GM España, Antonio Cobo, se refirió a los altos costos logísticos para la industria del automóvil en general y para GM en particular, "que son hoy en día incluso mayores a los gastos de personal", de ahí la relevancia de tener vías de comunicación que mejoren estos costos. Para el presidente de Pikolin, Alfonso Soláns, "la TCP es algo imprescindible para España y Aragón si queremos crecer".