Orientación y colaboración, las bazas para formar profesionales

El desajuste entre la oferta y la demanda de empleo en la comunidad fue el punto de partida del coloquio, donde centros de formación y empresas de recursos humanos compartieron sus tácticas para atenuarlo

Los ponentes coincidieron en buena parte de las ideas que pusieron sobre la mesa, como la importancia de promocionar el talento interno en las empresas o la necesidad de implantar procesos de orientación desde etapas educativas tempranas.

Los ponentes coincidieron en buena parte de las ideas que pusieron sobre la mesa, como la importancia de promocionar el talento interno en las empresas o la necesidad de implantar procesos de orientación desde etapas educativas tempranas. / Jaime Galindo

Lorena García

Lorena García

Las empresas aragonesas necesitarán cubrir 21.000 puestos de trabajo en los próximos meses, según datos de la Confederación de Empresarios de Aragón. Sin embargo, la falta de profesionales ha hecho que la atracción del talento se convierta en todo un reto. Algo que, sumado al receso demográfico de la comunidad, se traduce en un importante desajuste entre la oferta y la demanda de empleo. Estas y otras cuestiones sobre la situación del mercado laboral aragonés se analizaron en la segunda mesa redonda de la jornada Aragón, tierra de talento, organizada por EL PERIÓDICO DE ARAGÓN. Dicha mesa llevó por título El mercado laboral de Aragón, los perfiles más demandados; contó con la participación de César Romero, director general del Grupo San Valero; José Luis Tolosana, director general de Arajob; y Fernando Cabeza, CEO de Océano Atlántico; y estuvo moderada por el periodista Jorge Heras.

Una nueva realidad

Muchas empresas intentan reducir el desajuste oferta-demanda con la contratación de población inmigrante. En este aspecto, la empresa aragonesa de trabajo temporal Arajob es todo un referente. «Hay una competencia brutal entre empresas para determinados puestos de trabajo, y a corto plazo, la búsqueda de talento en el extranjero es una de las patas en la que tenemos que apoyarnos», manifestó su director general, José Luis Tolosana. Insistió en que Aragón es un fuerte polo de atracción de trabajadores extranjeros, por lo que «es necesaria la colaboración público-privada para que se haga una inmigración legal y ordenada» que corrija los desajustes. Ante las trabas administrativas, José Luis Tolosana transmitió que la Unidad de Grandes Empresas sirve de gran ayuda en este aspecto.

José Luis Tolosana, director general de Arajob.

José Luis Tolosana, director general de Arajob. / Jaime Galindo

En 2021, Aragón era la única comunidad en la que no había ninguna empresa de trabajo temporal de ámbito autonómico, y para llenar ese segmento de mercado, surgió Arajob. «Nació con un objetivo hacia las compañías comprometidas con Aragón, para dar ese valor añadido de cercanía y conocimiento de la empresa aragonesa», afirmó su director general. Desde entonces, Arajob ha experimentado una gran evolución hasta ser una empresa referente en recursos humanos y selección de personal. En este sentido, José Luis Tolosana manifestó que el 98% de las contrataciones se dan a través de empresas privadas de colocación como Arajob, frente al 2% que supone el Servicio Público de Empleo (Sepe). Es decir, de 520.000 empleos que se contrataron en 2022, solo 10.000 fueron a través del Sepe. «Eso quiere decir que la empresa privada es más dinámica que la administración en hacer de puente de unión entre oferta de empleo y demanda», defendió.

"La búsqueda de talento en el extranjero es una de las patas sobre la que tenemos que apoyarnos a corto plazo"

José Luis Tolosana

— Director general de Arajob

Adaptar y transformar

Para afrontar los nuevos requerimientos del mercado laboral, César Romero, director general de Grupo San Valero, señaló que «hay que adaptarse y transformarse», y eso es lo que lleva haciendo el grupo zaragozano desde el comienzo de su actividad en 1953 como escuela de capacitación profesional para peones y aprendices. Además de la adaptación permanente a las nuevas legislaciones en el ámbito educativo, César Romero mencionó la necesidad de adaptarse a las demandas urgentes de capital humano por parte de las empresas; algo que afrontan mediante planes de contingencia en los que desarrollan programas directamente con la empresa que solicita la mano de obra.

La parte de transformación va más allá y requiere también anticipación. La apuesta de Grupo San Valero en la mejora de la universidad se encuentra focalizada en ampliar las ingenierías y crear titulaciones híbridas como el Grado en Ciberseguridad o el Grado en Inteligencia Artificial. En cuanto a la formación profesional, el director general concretó que empezaron a asumir la transformación hace 5 años trabajando para dignificarla como un modelo de enseñanza igual de válido, y apostaron por «crear más de 1.500 plazas de formación profesional en Aragón». César Romero también puso de relieve la importancia de aprovechar todo el talento que hay en Aragón y buscarlo «en sitios donde otros no miran», de comunicar bien las ofertas de empleo distinguiendo el perfil al que se dirigen, y de trabajar en la transformación y el desarrollo del talento interno. En este último punto, Romero expresó su «gran ventaja» por tener 1.200 talentos en el Grupo San Valero, institución que representa todo un modelo a seguir en cuanto a formación.

César Romero, director general del Grupo San Valero.

César Romero, director general del Grupo San Valero. / Jaime Galindo

Por su parte, Océano Atlántico es otro gran referente de la comunidad, en su caso como centro de formación profesional. Nació en 1997, y empezó como una empresa creada por apasionados de la educación –como su CEO, Fernando Cabeza– que desarrollaban proyectos para construir una sociedad mejor, mientras recorrían Aragón buscando un espacio en el que ser de utilidad. «Hace 18 años encontramos en el mundo educativo un sector que nos necesitaba y al que podíamos aportar; ahora tenemos más de 800 trabajadores», relató Fernando Cabeza. Aunque en su opinión el campo educativo sigue necesitando «muchos cambios y gente que aporte nuevas ideas», arrojó una visión muy positiva del momento actual: «Ahora mismo, ser joven en Aragón es una muy buena noticia, es un mundo de oportunidades y, desde nuestra posición como centro de formación veterano, tenemos que posibilitar que aprovechen esas oportunidades y se coloquen en una posición de talento, tan necesario hoy en Aragón». 

"Es importante trabajar en proyectos personalizados para cada alumno, por medio de un aprendizaje basado en retos"

César Romero

— Director general del Grupo San Valero

Formar personas

Bajo esa óptica, Fernando Cabeza explicó las estrategias que Océano Atlántico lleva a cabo para impulsar el talento desde el ámbito educativo. Por un lado, se enfocan en la «formación de personas». «Tenemos que formar personas que tengan curiosidad, que quieran aprender y desarrollarse, que es lo que necesita el mundo empresarial». También cuentan con un potente sistema de orientación para los jóvenes, con el que primero inician una fase de autoconocimiento con test psicológicos para intentar guiarlos, y luego les enseñan cómo es el mundo exterior, lo que van a hacer, para que vean el lado atractivo. Todo ello para conseguir el que, según Fernando Cabeza, es el gran desafío de Océano Atlántico: «colocar a esas personas en un entorno en el que estén a gusto para que se desarrollen y sean felices en la empresa», activando así el talento en Aragón.

Todos los ponentes coincidieron en la revalorización de las habilidades transversales. «Los centros tenemos que enseñar a los alumnos a que aprendan a aprender para luego aprender a ser; ser personas con habilidades como el trabajo en equipo o el espíritu crítico», defendió César Romero, quien también destacó la utilidad de la educación individualizada. «Es importante trabajar con proyectos personalizados para cada alumno, por medio de un aprendizaje basado en retos en el que haya una hibridación de las especialidades», explicó. Mientras, José Luis Tolosana hizo hincapié en «saber valorar la actitud de la persona, por encima de las aptitud». Además, los tres ponentes coincidieron también en la necesidad de formar perfiles que atiendan a los requerimientos de las empresas, que además de aspectos técnicos, cada vez se basan más en cuestiones actitudinales.

Desde edades tempranas

Ante los retos de ajustar la oferta a la demanda de empleo e impulsar el talento, los centros formativos y las empresas han encontrado en la formación profesional un puente de unión sólido y esperanzador, que deben fomentar con la orientación como herramienta. En este punto, Grupo San Valero y Océano Atlántico tienen un enfoque idéntico. César Romero afirmó que «la orientación en edades tempranas es clave», igual que para Fernando Cabeza, quien aportó que esto «hará que los jóvenes se alineen con las necesidades del mundo exterior y mejore la unión entre oferta y demanda tan necesaria para aprovechar las posibilidades del crecimiento de Aragón».

Fernando Cabeza, CEO de Océano Atlántico.

Fernando Cabeza, CEO de Océano Atlántico. / Jaime Galindo

Aunque reconoció que queda mucho por mejorar, César Romero resaltó el trabajo del grupo para reforzar la orientación laboral permaneciendo muy cerca de las empresas, porque, tal y como expuso, «tenemos que estar toda la tribu junta: empresas, agentes sociales, centros de formación y universidades». Además, el director general comunicó que el Grupo San Valero se encuentra desarrollando proyectos educativos pioneros, financiados con fondos europeos, en los que están diseñando «nuevos modelos que unen formación profesional, universidad y empresa».

Mantener las alianzas

Desde el Grupo San Valero y Océano Atlántico volvieron a estar de acuerdo en que esa alianza entre la administración y el mundo empresarial hace posible el desarrollo de la FP Dual, una valiosa herramienta de aprendizaje desde la práctica en el entorno empresarial, y coincidieron en sus buenos resultados. «Nosotros representamos el 20% de la FP dual en Aragón, y nos está funcionando muy bien», alegó César Romero. No obstante, César Romero y Fernando Cabeza sí que solicitaron a la administración más flexibilidad para facilitar el abordaje de todos estos retos. «Vamos a flexibilizarnos todos y unirnos para conseguir el objetivo común de que Aragón, una tierra llena de posibilidades, eche para adelante con nuestra gente», pidió Fernando Cabeza.

"Tenemos que formar personas con curiosidad que quieran aprender y desarrollarse, que es lo que necesita el mundo empresa"

Fernando Cabeza

— CEO de Océano Atlántico

Mientras tanto, la acelerada evolución tecnológica no deja de plantear nuevos desafíos, como la llegada de la inteligencia artificial. Un fenómeno imparable que ha venido para cambiar las reglas del juego, especialmente en el tablero educativo, que ya comienza a introducir la IA. En definitiva, un reto más que se suma a otros como ajustar la oferta a la demanda de empleo, formar los perfiles profesionales que requieren las empresas o desarrollar el talento, a los que Aragón hace frente con jugadas estratégicas de orientación y colaboración entre empresas y centros formativos, consiguiendo así mantener su buen ritmo de transformación y crecimiento