Clara Arpa: "En ARPA nos vemos como una startup que todos los años se tiene que reinventar"

La empresaria zaragozana es CEO de la conocida firma especializada en la creación y suministro de equipos móviles de campaña

Es presidenta del Pacto Mundial de las Naciones Unidas y embajadora de la Marca Ejército

Clara Arpa, en una de las cocinas de campaña que exporta su empresa

Clara Arpa, en una de las cocinas de campaña que exporta su empresa / Ángel de Castro

Clara Arpa (Zaragoza, 1964) lleva al frente de ARPA desde 2006 y, desde entonces, la empresaria ha elevado a esta compañía de capital 100% aragonés a categoría de referencia de calidad internacional, con la denominación por parte de la ONU del estándar de campamento de campaña como ARPA City. Una apuesta por la calidad y la sostenibilidad a partes iguales que ha llevado a su empresa de creación y suministro de equipos móviles de campaña a ser la única del mundo en vender siete hospitales de campaña al ejército de Arabia Saudí. Actual presidenta del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Clara Arpa mantiene una clara apuesta por la sostenibilidad que materializa en proyectos como Fundación CIDS o ARPA CHANGE, así como en la instalación de la primera hidrogenera abierta al público en España y la participación en el proyecto europeo NOMAD e Indy, entre otras iniciativas. Además, la empresaria participa con su compañía en NEOM, la ciudad del futuro de Arabia Saudí, uno de los sesenta países en los que sus equipos y desarrollos están presentes. Entre ellos, EE.UU, cuyos marines comen en lo que el ejército español ya denomina "las Arpas", su estándar de cocina de campaña.

Clara Arpa tomó el relevo al frente de la compañía tras el fallecimiento en 2006 de Antonio Arpa, su padre y fundador de la empresa. Un maestro y emprendedor calamochino que en 1968 decidió diseñar unos quemadores para que sus alumnos pudieran hacer comidas calientes en las excursiones que organizaba. De esta sencilla inquietud derivó el desarrollo un quemador que funcionaba a cualquier altitud y con cualquier fuente de energía o combustible que captó la atención de la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales de Jaca primero, y al ejército cubano después. Desde entonces, Antonio Arpa pudo llevar los campamentos, equipos, hospitales y shelters móviles desarrollados en su empresa a los ejércitos de países como EE.UU, Mozambique o Afganistán.

Nombre: Clara Arpa Azofra

Profesión: Diplomada en Relaciones Laborales y empresaria

Cargo: CEO de ARPA y miembro de la junta directiva del Pacto Mundial de las Naciones Unidas

Lugar y año de nacimiento: Zaragoza, 1964

Trayectoria: Clara Arpa es diplomada en Relaciones Laborales y desde 2006, CEO de la empresa ARPA, dedicada a la creación y suministro de equipos móviles de campaña. Embajadora de la Marca Ejército, recibió en 2019 y en 2007 la Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco de la mano del Ministerio de Defensa de España. La zaragozana tomó las riendas de la empresa en 2006, y desde entonces ha hecho una apuesta por la sostenibilidad, con proyectos como ARPA CHANGE, marca el grupo dedicada al diseño y fabricación de soluciones de sostenibilidad, o la Fundación CIDS. Clara Arpa ha llevado su empresa a la ciudad saudí del futuro NEOM. Uno de los grandes hitos de la empresaria fue la venta de siete hospitales de campaña a Arabia Saudí, situando a ARPA como la única empresa del mundo en conseguirlo. Desde que se hiciera cargo de la empresa, ARPA ha recibido galardones como Premio a la Internacionalización, a la Promoción Exterior, a la Excelencia Empresarial y premio CEPYME. También ha llevado a su empresa a conseguir el certificado NATO de cumplimiento de las normas OTAN de calidad PECAL/AQAP 2110 y 2130, así como el Tempest Evaluation Certificate EM/336/2019 otorgado por el Centro Criptológico Nacional (CCN). Asimismo, su empresa cuenta con el International Bureau of Containers and Intermodal Transport ISO 6346 (B.I.B. CODE) y cuenta con la conformidad de producción por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo RD 750/2010 (Direct. EU 2007/46). Clara Arpa es presidenta del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, y miembro de la Junta Ejecutiva del mismo organismo internacional.

Frase que aplica a su día a día: "Siempre digo que fácil no hay nada en este mundo. Es cuestión de constancia, perseverancia y conocimiento".

Un 12% de mujeres en Defensa

Clara Arpa se puso al frente de la compañía en 2006, con una firme apuesta por la sostenibilidad, en un campo, la defensa, en el que la presencia femenina se ha estancado en un 12% desde hace varios años, explica. Además, en lo que a la industria de defensa se refiere, en la actualidad “somos muy pocas, muchas veces soy la única. A veces me encuentro con alguna directiva de alguna gran empresa, pero somos pocas”, afirma. “Es un sector menos conocido, quizá poco atractivo para el público general. Para dedicarte a la industria de la defensa te tiene que ir mucho la innovación, la tecnología… las carreras STEM”, donde todavía hay menos mujeres que hombres, comenta.

Una situación que considera que podría revertirse si “a las niñas se les inculcara un poco más la tecnología. Todo pasa por la educación. Y por supuesto, tener referentes, pero si no conseguimos que se le dé difusión, es más complicado”, afirma. Aunque Arpa también apunta a otro hándicap de la industria de defensa para la extensión de la presencia femenina. “Dentro del sector industrial de la defensa hay mucha exportación, donde también vemos que hay menos mujeres”, explica. Ya que según relata la actual presidenta del Pacto Mundial de las Naciones Unidas, en las misiones comerciales se ven menos mujeres, porque “conllevan una serie de viajes, estar fuera de casa, que también hace complicada la conciliación”, asevera.

"Hay que poner mucho de tu parte, porque en la última milla solemos estar solos"

Como anécdota ilustrativa de los problemas de conciliación, que afectan hoy en mayor medida a las mujeres, Clara Arpa menciona una conversación informal que tuvo lugar en un chat profesional en el que ella participa, y en el que una de sus participantes comentó cómo, en una reunión informativa de acceso al colegio, asistieron “22 madres y dos padres. Eso no cambia”, afirma. En este sentido, la empresaria se manifiesta contraria a la reducción de los horarios de los colegios “públicos, sobre todo, porque ahí la gran perjudicada es la madre. En la mayoría de los casos, es la madre la que coge la jornada reducida para poder recoger a los hijos del colegio”, anota.

Arpa también apunta la importancia de la corresponsabilidad dentro de la pareja. “Uno tiene que conciliar en casa, la pareja se tiene que poner de acuerdo para ver quien está dispuesto, durante esos años, a sacrificar su carrera profesional. Luego los niños crecen y se puede retomar la carrera”, afirma una empresaria que se encuentra en constante fase de transformación. “Siempre estamos aprendiendo. Nosotros nos consideramos una startup que todos los años se tiene que reinventar. Ahora más que nunca, todo cambia muchísimo, estamos en una época de incertidumbre. No se ha resuelto una crisis y ya viene otra”, asevera.

Hospital de campaña instalado por ARPAen Feria de Zaragoza con motivo del covid que no fue necesario ser utilizado

Hospital de campaña instalado por ARPA en la Feria de Zaragoza con motivo del covid que no fue necesario ser utilizado / EL PERIÓDICO

Constancia, perseverancia y conocimiento

Clara Arpa ha alcanzado hitos como empresaria en países donde las mujeres tienen poco acceso a la escena pública, como Arabia Saudí. Una barrera, a priori, de partida, que la empresaria considera que “hay que tomar con naturalidad. Cuando estoy en una reunión se me olvida el género de las personas que estamos en ella. Estás trabajando con gente profesional. Cuando se dan cuenta de que sabes de lo que estás hablando, el respeto es mutuo”. De hecho, “en Arabia Saudí conocí a muchísimas mujeres, porque ellos mismos me llevaban a sus casas, a que conociera a sus mujeres y sus hijas, para que hablara con ellas. Yo sí que podía meterme hasta la cocina”, unos espacios vedados para un empresario de género masculino, recuerda la empresaria, donde también se pueden tejer interesantes alianzas.

"Dentro del sector industrial de la defensa hay mucha exportación, donde también vemos que hay menos mujeres"

Y es que, tal y como afirma Arpa, abrirse camino a nivel internacional es difícil para todos. “A nosotras nos cuesta llegar, pero es que cuesta mucho llegar, seas hombre o mujer”, comenta. “Siempre digo que fácil no hay nada en este mundo. Es cuestión de constancia, perseverancia y conocimiento”, sobre todo en un contexto en el que “las cosas son cada vez más complicadas, cuesta sacarlas más”, comenta. Por ello, su mensaje para futuras generaciones de mujeres que se sientan atraídas por su sector es que “si quieren, pueden. Es complicado y van a tener que poner mucho de su parte, porque en la última milla solemos estar solos”, expone. Aunque, tal y como ella también afirma, si una puerta se cierra, otra se abrirá en otro lugar. “El mundo es muy grande, si en un sitio no me quieren me voy a otro. Intentaré dejar mi impronta, mi mini granito de arena”, concluye.