Está absolutamente descartado que Pablo Álvarez pueda regresar al Zaragoza". Son palabras de Juan Cruz, agente del lateral argentino, al que hace unos días le comunicó el Catania que no contemplaba volverlo a ceder. Su continuidad en el club aragonés pasaba por intentar su desvinculación del equipo italiano o por una nueva cesión. Ni una ni otra cosa es factible ya. El nuevo entrenador, Rolando Maran, cuenta con él y la entidad italiana solo se plantearía una salida si llegara una oferta convincente, en concreto que superara el millón de euros. De hecho, 1,2 millones es la cifra que se le anunció al agente.

"Se queda en Catania seguro, porque no lo quieren volver a ceder. Nos lo comunicaron ya y el jugador se ha hecho a la idea. Solo saldrá mediante un traspaso y ya sé también por el Zaragoza que eso es imposible. A Pablo le apetecía mucho seguir allí, se ha encontrado a gusto, pero no va a poder ser", añadió el agente del futbolista, al que le quedan dos años de contrato en el Catania.

Las palabras de Juan Cruz concuerdan con las que realizó hace unos días Sergio Gasparin, director general del Catania, afirmando que el club italiano no iba a intentar la continuidad de Motta, cedido por la Juve al Catania, porque contaban con el regreso de Pablo Álvarez.

La continuidad del lateral derecho era una de las prioridades para Manolo Jiménez, que deseaba que siguieran algunos de los cedidos de la pasada temporada. En concreto, Apoño, Pablo Álvarez, Ruben Micael y, en menor medida, Zuculini. El Málaga ha tasado a Apoño en tres millones de euros. El futuro de Micael se empezará a resolver tras la Eurocopa, pero Jorge Mendes, su agente, prefiere que regrese a Portugal, al Sporting de Braga, y en el Atlético no tiene sitio.

Álvarez llegó sobre la bocina del mercado de enero y jugó 15 partidos de Liga, siendo indiscutible en el lateral derecho. La llegada en las últimas semanas de Maran al banquillo del Catania y de Nicola Salerno a la Dirección Deportiva del club italiano han cambiado los planes del club con respecto a Pablo Álvarez, que también estuvo en la agenda de Independiente, si bien no deseaba regresar a Argentina.