Joaquín Solanilla suele bajar sus vacas del puerto hacia finales de noviembre. Este año calcula que para la semana del Pilar ya estarán todas en la granja. La falta de lluvias ha dejado el monte sin pasto, así que no le va a quedar más remedio que recogerlas y alimentarlas con alfalfa y pienso en su explotación de Boltaña. "El problema es que no volverán tan gordas y tendremos que recuperar lo perdido", lamenta Solanilla, que apunta que el coste por vaca y día ronda los 1,10 euros. Él tiene 70, así que el sobrecoste que deberá asumir superará los 3.000 euros.

Colegas suyos aún están en una peor situación. Asegura Solanilla que en la zona de El Pueyo de Araguás, también en el Sobrarbe, las vacas ya llevan diez días en las granjas: "Esto es como todo, hasta que no te afecta al bolsillo...".

El ganadero de Boltaña, que está afiliado a UAGA, tiene además cerca de 500 ovejas, aunque no tienen tanto problema de falta de pasto porque están en una zona más alta, cerca del refugio de Góriz. "Lo que ya está pasando en la parte más baja es que los abrevaderos se están secando y tienen que desplazarse mucho para poder beber", lamenta Solanilla, que subraya que en la comarca de la Jacetania las ovejas llevan días en las granjas.

El ganadero ya piensa en la próxima campaña y, por el momento, no tiene buenas perspectivas. "Por aquí llevamos dos meses sin una gota de agua y septiembre también se presenta seco; si seguimos así no se creará hierba para el año que viene y eso ya es más preocupante", advierte.