El Real Zaragoza intentará resacirse hoy de la dolorosa derrota sufrida el pasado lunes en la Liga contra el Celta de Vigo (0-1) eliminando al Granada en el Nuevo Estadio de Los Cármenes y clasificándose para los octavos de final de la Copa del Rey. El cuadro aragonés afronta este encuentro con la renta a favor de un gol (1-0) cosechada en la ida en La Romareda y cualquier empate también le metería en la siguiente ronda del torneo del KO. El Zaragoza ya ha visitado el terreno granadino esta campaña en la Liga y entonces se impuso por 1-2. A partir de ese encuentro fue cuando empezó a jugar mejor al fútbol y a conseguir buenos resultados.

A priori y pese a la derrota frente al Celta, el Real Zaragoza llega en mejor forma y con menos urgencias a este compromiso copero que el Granada. Su rival, por ejemplo, ocupa ahora mismo uno de los puestos de descenso y el próximo domingo recibe al Espanyol, colista de Primera División, con la obligación de ganar. En cambio, el Zaragoza se encuentra a cuatro puntos de la zona de descenso y en la reanudación de la Liga, también en domingo, rendirá visita a un Mallorca que está pegado a las plazas de peligro.

No obstante, tampoco conviene olvidar que el Granada llega al choque de hoy con dos días más de descanso que el Real Zaragoza, puesto que los granadinos disputaron su último compromiso de Liga el sábado en campo del Valladolid, donde cayeron por 1-0, mientras que el conjunto zaragocista lo hizo el lunes. Manolo Jiménez ha clamado en el desierto por esa circunstancia, pero ya no hay marcha atrás. Hoy sus jugadores, con más cansancio acumulado en la mayor parte de los casos que sus rivales, tendrán que esforzarse al máximo para tratar de seguir adelante en la Copa del Rey.

El Zaragoza, con seis títulos de Copa en sus vitrinas, ha sido eliminado a las primeras de cambio del torneo del KO en las últimas temporadas, pero ahora pretende recuperar un papel de protagonista en su competición preferida. El curso pasado cayó precisamente ante el Alcorcón (Segunda División) bajo la dirección desde el banquillo de Juan Antonio Anquela, que ahora es el entrenador del Granada. Esa eliminación acabó por costarle el puesto a Javier Aguirre, que poco después sería relevado por Manolo Jiménez, quien se ha empeñado en que el cuadro aragonés haga un buen papel en la Copa del Rey de este curso.

Para el conjunto zaragocista seguir adelante en la Copa sería como tomarse un gran sorbo de confianza para afrontar el siguiente encuentro ante los isleños. De hecho le permitiría romper con una racha de dos derrotas consecutivas en la Liga, porque antes de perder con el Celta, en La Romareda, había caído también en el Camp Nou con el FC Barcelona (3-1) pese a realizar un partido muy digno. Además podría finalizar con un buen sabor de boca otro mes de noviembre negro en la Liga, donde solo ha podido sumar tres puntos de los 12 en juego, merced al triunfo cosechado en casa contra el Deportivo de La Coruña (5-3).

CON LOS TITULARES

Todo apunta a que Manolo Jiménez realizará algunas rotaciones en el once más habitual en el estadio de Los Cármenes, pero, pendiente hasta el último momento de cómo pueden recuperarse sus jugadores del esfuerzo llevado a cabo el lunes ante el Celta, ha desplazado prácticamente a todos sus titulares hasta Granada. Solo se quedó fuera de la convocatoria Antonio Galdeano Apoño, aquejado de molestias en los isquiotibiales. El centrocampista malagueño, además, no atraviesa ahora mismo por un buen momento de juego. Jiménez ha asegurado que hoy utilizará el mejor equipo posible para conseguir el pase para los octavos de final de la Copa del Rey.