El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, volvió a pronunciarse sobre la abdicación del Rey, Juan Carlos, y el proceso de sucesión abierto desde entonces. Si primero se declaró monárquico, ayer criticó el protocolo elegido para la proclamación de Felipe VI. El regidor calificó de "disparate" que no haya invitados extranjeros en la proclamación del futuro Rey.

El alcalde de la ciudad señaló que habría que hacer el acto "como se hace en otros países" porque, añadió, "no hay nada que esconder". El socialista lamentó que la proclamación haya caído en el "populismo" y la "demagogia" de quienes cuestionan y critican los gastos derivados de la presencia de altos mandatarios internacionales. Se aventuró a afirmar que si quien tomara el cargo fuera un presidente de la república "no pasaría lo mismo".

Belloch, que se confesó monárquico en el pleno municipal de la semana pasada tras los ataques recibidos desde la bancada de CHA e IU. Los socialistas fueron criticados por no oponerse a la sucesión sin realizar un referendo previo que permita decidir al pueblo la forma de estado. Tanto CHA como IU exigieron en el pleno un referendo popular.

El alcalde reiteró su apoyo a la monarquía y aseguró que "los de la casta hemos hecho bien nuestro trabajo" porque esta forma de Estado, insistió, ha permitido los 30 mejores años de la historia.