El yacimiento de huevos de dinosaurio hallado ahora hace un año en la localidad de Loarre (Huesca) sigue ofreciendo nuevos materiales. Un equipo internacional de paleontólogos y preparadores liderado por el Grupo Aragosaurus de Universidad de Zaragoza, en colaboración con la Universidad de Lisboa, continuó en septiembre con las excavaciones y lograron la extracción de un gran nido, que contiene al menos 12 huevos, y que se encontraba integrado en un bloque de roca de más de dos toneladas de peso.

Los fósiles se suman a los más de 60 identificados hasta la fecha. Los huevos son esféricos, tienen unos 15 centímetros de diámetro y presentan «un estado de conservación óptimo», según informó ayer la Universidad de Zaragoza. «Se encuentran agrupados, sugiriendo la existencia de varios nidos. Un análisis preliminar apunta que pertenecen a dinosaurios saurópodos titanosaurios, unos herbívoros cuadrúpedos de largas colas y cuellos, que podrían alcanzar los 20 metros de longitud», según señaló la institución.

El gran nido fue detectado en 2020 y durante este tiempo ha estado protegido con celulosa y escayola hasta proceder a la extracción de los huevos, que era la finalidad de la campaña de este 2021. La actuación paleontológica ha estado dirigida por Miguel Moreno-Azanza, Carmen Núñez-Lahuerta y Eduardo Puértolas, quienes han contado con la participación de 25 paleontólogos y estudiantes de instituciones españolas, portuguesas y alemanas.

Uno de los huevos de dinosaurio extraídos de la gran roca. EDUARDO MEDRANO

Un museo muy pronto

En total, cinco personas han dedicado ocho horas al día durante 50 días para excavar el nido, que fue finalmente extraído con ayuda de una máquina excavadora. «Es poco habitual que se obtengan bloques de estas dimensiones en una actuación paleontológica, pero a pesar de las dificultades técnicas que conlleva este proceso, la operación ha sido un éxito», indicaron desde el campus.

Esta excavación, en concreto, ha estado financiada por la Fundación para la Ciencia y la Tecnología de Portugal y el Ministerio de Ciencia e Innovación de España, a través de proyectos de investigación.

Este gran bloque, así como otros diez de menor tamaño extraídos este año, han sido transportados a un almacén provisional en la localidad de Loarre, a la espera de la culminación de las obras de acondicionamiento del futuro Laboratorio-Museo que se localizará en el casco urbano de la población oscense.

La previsión es que el espacio abra sus puertas a los visitantes la próxima primavera, que podrán seguir en directo el proceso de preparación y estudio de los fósiles de este yacimiento.

Esta iniciativa, precisamente, se pondrá en marcha gracias al espaldarazo de fondos europeos logrados por la Universidad de Zaragoza (a través de un proyecto del paleontólogo José Ignacio Canudo) para fomentar el turismo en Loarre vinculado al yacimiento de huevos de dinosaurio.

En concreto, el museo tendrá dos salas expositivas donde se pondrá de manifiesto la importancia de este yacimiento y se explicará la metodología de una excavación paleontológica compleja, además de permitir presenciar el trabajo real de los preparadores. Este lugar, que funcionará como una sala satélite del Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza, contará tanto con especímenes reales del yacimiento de Loarre como con réplicas de huevos de dinosaurio de otros lugares del mundo