En dos años y medio, Becton Dickinson (BD) empezará a fabricar en Zaragoza los primeros componentes de unas jeringuillas de vidrio de última generación que alcanzarán una producción anual de 400 millones de unidades en 2030. Este martes se puso la primera piedra de este gran proyecto, que supondrá la inversión de 206 millones de euros y la creación de 600 puestos de trabajo en diez años, una planta de grandes dimensiones y un alto componente tecnológico que situará a la ciudad en el mapa de la industria médica a nivel internacional. El acto reunió a varios directivos mundiales de la multinacional estadounidense, así como el presidente de Aragón, Javier Lambán, y al alcalde de la ciudad, Jorge Azcón.

En la pugna por captar esta inversión se encontraban Madrid y la Comunidad Valenciana, una vez que la compañía decidió ubicar este desarrollo industrial en España, pero se decantó por Aragón por ser el emplazamiento que mejor se ajustaba a sus criterios técnicos y económicos.

El lugar elegido fue concretamente el polígono Empresarium de Zaragoza, donde la pasada primavera compró al consistorio una parcela de 102.421 metros cuadrados por más de 3,1 millones de euros (sin IVA). La máquinas ya trabajan en los terrenos para hacer los movimientos de tierra previos a la construcción de la primera planta, que tendrá de 8.000 metros construidos, una superficie que se ampliará hasta 30.000 cuando se complete toda la inversión. La nueva instalación dispondrá de los máximos estándares en materia de sostenibilidad y ecoeficiencia, y será totalmente digital, incorporando lo último en tecnologías inteligentes y autónomas.

En una primera fase, BD invertirá 66 millones de euros para la levantar la planta y las primeras líneas de producción de componentes plásticos para jeringuillas precargables y de sistemas de seguridad para prevenir lesiones por pinchazos de agujas para los profesionales sanitarios y los pacientes. La plantilla inicial será de 150 trabajadores. En una segunda etapa, el desembolso alcanzará los 140 millones de euros y se centrará en ampliar la producción de las jeringas de vidrio.

Una empresa «en expansión»

Alberto Mas, vicepresidente ejecutivo y presidente de BD Medical, destacó que la compañía está «en expansión» y que ha doblado sus ventas en los últimos años gracias al crecimiento orgánico y la adquisición de empresa como Fabersanitas, ubicada en Fraga, con la que desembarcó en Aragón en el año 1986. La planta oscense también está dedicada a la fabricación de jeringuillas, de donde salen 6.000 millones de unidades al año y 40 millones de componentes al día. Se trata de uno de los negocios de la multinacional «con un mayor índice de crecimiento» y al que pertenece la futura instalación de Zaragoza.

«La elección de Zaragoza se debe a las condiciones óptimas que ofrece la región, a las sinergias que pueden producirse con las instalaciones de Fraga, y a los resultados y excelente comportamiento de las plantas que existen actualmente en España», subrayó Mas, quien agradeció «el apoyo y la confianza» del Gobierno de Aragón y el ayuntamiento para llevar a cabo el nuevo proyecto. «Nos queda un largo camino por recorrer juntos», dijo a las autoridades locales.

La inversión de la compañía en Aragón asciende a los 450 millones de euros entre las ampliaciones ya realizadas y previstas en su planta del Bajo Cinca y la nueva fábrica en Zaragoza. Esta última será la sexta de BD en el mundo centrada en el negocio de dispositivos precargables, componentes de plástico y jeringas de vidrio Hypack, un producto cada vez más demandado tanto para vacunas como para tratamientos de enfermedades crónicas como artritis reumatoide, esclerosis múltiple o cáncer.

Alex Conroy, vicepresidente ejecutivo de la cadena de suministro integral de BD, destacó la «competitividad» de las plantas del grupo en España, donde tiene otras dos fábricas en Madrid y Cáceres, además de en Huesca.

Lambán y Azcón refrendan unidos el proyecto industrial

El presidente de Aragón, Javier Lambán, y el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, se vieron esta martes las caras por primera vez en un acto público desde que el segundo formalizara su candidatura para presidir el PP aragonés. Aún así, la rivalidad política que late entre ambos dirigentes quedó al margen en sus intervenciones, con las que ensalzaron la «magnífica noticia» que supone la nueva fábrica de Becton Dickinson y agasajaron a la compañía por haber elegido esta tierra para ubicar esta gran instalación industrial. Eso sí, el primer edil se arrogó un papel decisivo en la captación de la inversión y destacó la «extraordinaria agilidad» del ayuntamiento en todo el procedimiento, mientras que el mandatorio autonómico presumió de la paz social de la comunidad y el enorme potencial de crecimiento que tiene el sector médico-farmaceútico. 

Becton Dickinson (BD) fue fundada en EEUU hace 124 años y hoy una de las mayores compañías de tecnología médica del mundo, con 81 fábricas, 75.000 empleados en 190 países y un volumen de negocio de 20 billones de euros. En España, inició su andadura hace más de 40 años y cuenta con tres plantas –una de ellas en Fraga (Bajo Cinca)–, con una producción anual de 10.000 millones de productos sanitarios. Las otras dos están en San Agustín de Guadalix (Madrid) y Almaraz (Cáceres).

La fábrica oscense cuenta con 600 trabajadores y es un referente mundial en la producción de jeringuillas, un mercado en el que ha tenido un gran protagonismo en la pandemia por hacer el modelo que mejor aprovecha las dosis de los viales contra el covid-19.