Nita Macía: "Aragón ha sido pionero en incorporar la responsabilidad social en el horizonte de las empresas"

-En febrero de 2021 se celebró la séptima edición del Congreso Internacional de RS, de carácter bianual. Fue una edición complicada por la pandemia, en la que se combinó el formato presencial y ‘online’, y donde se puso de relevancia la importancia de la medición en el ámbito de la RS. ¿Qué conclusiones se extrajeron de la cita?

La conclusión más importante es la necesidad de garantizar que los compromisos asumidos en pro de una empresa y de una administración responsable han de ser medibles y demostrables. A partir de ahí, que existen herramientas para hacerlo, y que se necesita todavía seguir trabajando por una sociedad justa, igualitaria y decente, que sea capaz de demandar el cumplimiento de los compromisos para así identificar y evitar el greenwashing. El desarrollo sostenible es un crecimiento equilibrado a largo plazo que no ponga en riesgo los recursos de las generaciones que aún no han nacido. Garantizarlo es una obligación, para la cual es necesario medir y transformar las consecuencias de los impactos que se generan, sobre el planeta, pero especialmente sobre las personas. 

«Todavía nos falta muchísimo para medir realmente el compromiso y poder rendir cuentas de la transformación»

-El primer congreso internacional de RS tuvo lugar en Zaragoza en 2010. ¿Por qué se eligió Aragón para celebrar el evento? 

Un grupo de expertos en la materia ligados a Zaragoza apostaron por dar relevancia a una tendencia casi desconocida y hacerlo en formato congreso desde esta ciudad. De este modo, Aragón fue pionero en incorporar cuestiones derivadas de la Responsabilidad Social en el horizonte (inicialmente de las empresas) con el fin de promover un sector empresarial moderno y comprometido. El Congreso de Responsabilidad Social es una iniciativa independiente que tiene como objetivo principal posicionar a la ciudad de Zaragoza y a la comunidad autónoma de Aragón, como referente en la reflexión de la responsabilidad social aplicada al sector privado y al sector público. Así consta en su propósito, y esa razón, unida a que es un congreso liderado por personas aragonesas, lo ha configurado como un congreso internacional independiente cuya sede permanente es Zaragoza.

-¿Qué supone para Zaragoza y para todo Aragón acoger esta cita?

A mi juicio, supone reforzar el compromiso de una ciudad que apuesta por la gestión responsable, por el compromiso con la ética. Ser sede permanente del congreso demuestra la fortaleza y la influencia en la materia de quienes lo organizan y el compromiso de las entidades y administraciones que lo apoyan. Sin duda representa una gran promoción que aporta reputación y solvencia a una ciudad que apuesta por albergar este debate edición tras edición al que acuden las más relevantes personalidades del ámbito de la responsabilidad social y de la ética en los negocios a nivel internacional.

-¿Cuál es el estado actual de la RS en la comunidad?

La diferentes iniciativas que se han puesto en marcha, especialmente la de los Sellos RSA del IAF, visibilizan el gran interés que las empresas , oenegés, etc. tienen por alinearse con la responsabilidad social, si bien es cierto que todavía nos falta muchísimo para medir realmente el compromiso y poder rendir cuentas de la transformación. 

-¿Cuál es el grado de concienciación de las empresas?

La empresas son conscientes de la necesidad de visibilizarse como empresas responsables y sostenibles, porque cada vez más la sociedad demanda este tipo de compromiso. Las grandes empresas saben que es imprescindible incorporar criterios ESG en su gestión para garantizar las inversiones y por tanto garantizar su continuidad, en definitiva demostrar su sostenibilidad con datos.

«La sociedad cada vez es más exigente a la hora de elegir y busca que sus elecciones se correspondan con sus valores»

-¿Qué beneficios les aporta el compromiso social y medioambiental?

En la actualidad, afortunadamente, la legislación incorpora como obligatorias cuestiones que durante mucho tiempo fueron voluntarias, de este modo el control de emisiones, la igualdad, el trabajo digno y justo, etc. se materializan en diferentes leyes: la ley de información no financiera, la ley de Igualdad y diversidad, la obligación de medición de CO2. Más allá del cumplimiento legal, una entidad que demuestre su compromiso con la ética, la transparencia, el planeta y las personas, sin duda contará con una reputación incuestionable. 

La sociedad cada vez es más exigente a la hora de elegir y busca que sus elecciones se correspondan con sus valores. Por otro lado, los inversores exigen garantías de que sus inversiones son sostenibles, nadie querría invertir en algo que no sabe si mañana dejará de existir.

-¿Hacia dónde camina hoy en día la RS?

En el ámbito de las inversiones y por tanto de las empresas, sin duda camina hacia lo que se denomina inversión socialmente responsable, a la inversión que no solo considera la rentabilidad, sino también el impacto social o medioambiental (ESG). A los fondos de inversión que siguen este criterio ISR o el ESG se los llama fondos responsables. A partir de aquí también la sociedad, en sus elecciones de compra o servicios, cada vez más pondera este tipo de criterios. y