Un vecino de Used ha denunciado que un hotel rural construido en un antiguo palacio rehabilitado, denominado La Lozana, emite ruidos que superan el máximo legal permitido, con las consiguientes molestias para quienes residen en el entorno.
José Enrique Liarte, que se considera perjudicado, ha interpuesto denuncias por vía administrativa y penal porque se considera víctima de un delito de contaminación acústica.
El nuevo alojamiento, que será inaugurado en breve, cuenta con 15 habitaciones y constituye un recurso económico en una zona próxima a la laguna de Gallocante y castigada por la despoblación.
"Una inversión muy beneficiosa"
“El hotel ha sido muy beneficioso pues ha generado cinco puestos de trabajo”, subraya Fernando Sánchez Herrero, alcalde de Used, que aclara que "las deficiencias se están subsanando".
“Los propietarios del alojamiento disponen de tres meses para arreglar los problemas de ruido y conseguir así la licencia de inicio de actividad”, informa. La licencia de apertura ya fue concedida tiempo atrás, asegura el regidor.
El ruido excesivo procede, al parecer, del sistema de geotermia, que utiliza la temperatura interior de la tierra para climatizar edificios.
“En la casa de mis padres se percibe mucho ruido, por encima de los decibelios permitidos”, afirma José Enrique Liarte. “Creo que el origen está en las bombas que impulsan el agua y en que la maquinaria del sistema de geotermia está mal montada”, declara.
Además, manifiesta que “los pozos para la captación de calor están hechos sin permiso”. “Hemos ido por vía administrativa y ahora iremos por la penal”, adelanta el denunciante.
