El aeropuerto de Zaragoza urbanizará durante 2023 y 2024 una enorme parcela de 20.000 metros cuadrados dentro del recinto propiedad de Aena, en el terreno vacío que se extiende hacia el aérodromo de la Base Aérea, para promover operaciones logísticas en un futuro e incluso construir «una o más nuevas terminales de carga» cuando haya clientes que lo demanden.
La operadora aeroportuaria invertirá cerca de un millón de euros en esta actuación, que persigue tener terrenos preparados para futuras inversiones para actividades logísticas de apoyo a la carga aérea. Se procederá a su licitación en el primer trimestre de 2023 y la zona de actuación de la obra es una parcela de terreno dentro del recinto aeroportuario, de 20.000 metros cuadrados de superficie, que se encuentra situada junto a la plataforma de aeronaves en un área de acceso controlado.
Así lo explicó ayer en una entrevista a este diario el nuevo director del aeropuerto de Zaragoza, Ricardo López Navarro, quien señaló que en estos terrenos podrían asentarse «si hay demanda, nuevas terminales de carga en una extensión del aeropuerto». Las enormes dimensiones de este terreno pueden compararse con la quinta terminal de carga que se estrenará el mes que viene, que se extiende por unos 2.500 metros cuadrados.
Será esta la quinta nave que se incorporará a la terminal, que ahora ostenta el tercer puesto en el ránking de Aena en cuanto a tráfico de mercancías, solo superada por Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat. Según confirmó López Navarro, la nueva terminal de carga será entregada el mes que viene a Swissport, que podrá explotarla desde entonces y podría regalar un aumento de las cifras del transporte de mercancías al aeropuerto de Zaragoza. La obra está siendo realizada por la constructora OHL y fue adjudicada por 4,2 millones de euros.
Más inversiones para 'handling'
Además, el aeropuerto será protagonista de nuevas inversiones con una nueva zona de actividades handling (los trabajos de asistencia en tierra a las aeronaves) de 3.500 metros cuadrados, que junto con la adecuación del drenaje, la instalación de puntos de recarga y la renovación del pavimento, entre otras acciones, conforman las inversiones contempladas en el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA 2) . «Esta es una demanda que ya existe», dijo López Navarro, por lo que corría prisa acometer la inversión.
Sin embargo, la gran inversión que este plan de gasto de Aena para el ciclo 2022-2026 recoge para el aeropuerto de Zaragoza esla reforma integral de la pista de aterrizaje principal. Se trata de la adaptación de la pista para poder operar sin limitaciones aviones tipo F, Boeing 747-800. Esta remodelación permitirá operar con aviones de carga a destinos lejanos en determinadas condiciones de temperatura, sobre todo cuando van con las bodegas llenas y a tope de combustible. Es decir, que permitirá operar a los cargueros de las rutas más largas cuando despegan con la máxima carga que les permite su capacidad y con el depósito lleno en condiciones de mucho calor y con destino a lugares como China, Corea o Estados Unidos.
Esta es una de las mayores pistas de toda la red de Aena en España, con una longitud de 3,7 kilótmetros y una de las joyas de la pista zaragozana. Por ello es la inversión estrella del quinquenio, pues cuenta con el 80% del total dedicado a Zaragoza.
La reforma de la pista supone invertir alrededor de 16,4 millones de euros y se prevé que su licitación se inicie en el primer trimestre de 2023 para cumplir con el plazo de tenerla lista para finales de 2024. «La planificación va según lo previsto, no tengo noticias de que vaya a haber grandes retrasos», aseguró ayer el director de la pista de Garrapinillos.
El plan de inversiones de Aena dejará cerca de 19 millones en total para el recinto aeroportuario de la capital aragonesa entre 2022 y 2026. Tanto las inversiones como los gastos de explotación de los aeropuertos se cubren con los beneficios de Aena, que obtiene del cobro de tasas a las compañías que operan en sus terminales.
Todas estas inversiones pretenden mantener a Zaragoza como uno de los polos de atracción más importantes en la logística aérea. La pista de la capital aragonesa se mantiene en el tercer puesto del ránking de Aena, aunque llegó a ostentar el segundo durante la pandemia por el bajón de El Prat al reducirse de forma muy considerable la llegada de vuelos comerciales, de los que esta terminal se aprovecha para cargar las bodegas de mercancías.
En cualquier caso, la pista de Garrapinillos vive tiempos algo inciertos al ver cómo la guerra de Ucrania ha reducido considerablemente el tráfico de mercancías del principal usuario de este servicio: Inditex. La multinacional de Amancio Ortega opera «·algo más del 75%» de la carga que se mueve desde el aeropuerto de Zaragoza y contaba con un potente mercado en el país ruso._En Zaragoza está además su plataforma más grande de logística de Zara Mujer, en Plaza.
