El Imserso continúa en crisis por la falta de plazas en algunos destinos

Los viajes del Imserso han empezado la nueva temporada con turbulencias. Este año tan solo hay disponibles 880.000 plazas para los 4,2 millones de jubilados que había inscritos en el programa. En Zaragoza, las personas acreditadas eran un total de 119.618 personas. Es decir, tan solo uno de cada cinco jubilados ha podido conseguir plaza en el destino demandado, lo que genera quejas entre los asociados que culpan directamente a las agencias de viajes. A este problema de desequilibrio entre la demanda y la oferta en los viajes para la tercera edad se suma la falta de ofertas hoteleras ante el bajo presupuesto del programa para este año. Y a la habitual guerra entre los operadores que quieren su parcela de negocio en el megacontrato, monopolizado ahora por la empresa Turismo Social.

El proyecto vacacional, ideado por Felipe González hace 40 años, sigue sin retomar el vuelo, pese a las promesas de llevar a cabo una modernización del sistema por parte del Gobierno. «No hay una contratación de alojamiento y transporte suficiente», señala Elisa Molino, directora de las agencias de viajes Mundo Actur. Según Molino, los inconvenientes se han visto incrementados debido a la falta de presupuesto en el programa.

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Poca oferta hotelera / Para esta temporada 2023- 2024, los viajes del Imserso han contado con 70 millones de euros, 30 millones menos que hace diez años. Es decir, una pérdida del 30% del presupuesto que se agrava con el encarecimiento de los servicios debido a la inflación.

Este año, los viajes se han reducido tanto en número de días ofertados como en establecimientos disponibles. «Destinos como Benidorm han contado con un 50% de hoteles menos que otros años», exponen desde Halcón Viajes, una de las dos compañías encargadas de gestionar el proyecto que ahora recae en manos de Turismo Social. «Hay menos dinero y por lo tanto se ofrecen menos plazas, pero aumenta la demanda de este tipo de ofertas», asevera Molino.

«Es como la cabeza de una botella», explica José Manuel Clua, miembro de la Asociación de Viajes Aragón. Para Clua, el problema está en que todo el mundo quiere los mismos viajes en las mismas fechas, «lo que es inviable», expone. Además, a pesar de que todavía quedan muchas plazas disponibles, tanto José Manuel como Elisa Mena, aseguran que la mayoría «son para la costa catalana, como Salou, y muchos de los usuarios no los quieren porque ya tienen casa en la zona», apunta Clua.

En el otro lado de la balanza están los destinos tradicionalmente más demandados, como las islas Canarias o Andalucía, cuyas plazas se agotaron a las pocas horas de que salieran las ofertas. «Como ocurre todos los años», aseguran desde Halcón Viajes.

Tradición o no, desde las agencias señalan que estos destinos, a diferencia de los años anteriores, «contaban con muy pocas fechas y plazas». Desde Zaragoza, según Molino, para viajar a Tenerife este año «solo estaban disponibles dos plazas y eran para noviembre y diciembre».

Un inconveniente numérico al que se le suma el problema «inédito» del transporte que ha sufrido el programa esta temporada. «Para Benidorm siempre había opción con movilidad incluida, pero este año no salieron fechas que lo incluyeran. Lo que es raro porque esta ciudad es una de las más demandadas siempre», acusa Molino.

Desde Halcón Viajes niegan la falta de transporte. Según la empresa, a pesar de que localidades como Benidorm han tenido muy pocas plazas con transporte (tan solo en los meses de noviembre y diciembre), actualmente se puede reservar en lista de espera para varias fechas de los últimos meses del año.

«Este programa está vivo durante toda la campaña, salen más ofertas y muchas ofrecen la movilidad», inciden. Sin embargo, para a las islas o Andalucía, salvo confirmaciones de lista de espera, a día de hoy es «prácticamente imposible conseguir más plazas», concluyen.

La solución de la mayoría de los usuarios que se quedan sin plazas suele ser la misma: «Desde hace unos años mis padres dejaron de inscribirse en el Imserso y viajan a través de otros programas que son privados como Mundo Senior», explica una joven de Zaragoza.

Este año, además, por primera vez en la historia de este polémico programa, la empresa Turismo Social (integrada por Ávoris y Halcón Viajes) se impuso a Mundiplan (una Unión Temporal de Empresas integrada por Iberia, IAG y Alsa), con quien hasta la temporada pasada compartía los tres lotes de viajes: la costa peninsular, la insular y el turismo de interior.

Una decisión del Gobierno Central que no gustó y fue recurrida por las tres concursantes fallidas (Mundiplan, Seniorplan 2.0 y Soltour), aunque el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales (TACRC) lo desestimó.

«Es la historia de siempre», declara José Manuel Clua. Según el miembro de la asociación de Viajes Aragón, «es el cuento de nunca acabar. La última vez que salió a sorteo también hubo la misma guerra de recursos entre Mundiplan y Turismo Social. Y entre quejas y lamentos luego cuesta organizarse». H