Educación | La convivencia en las aulas, el viejo y el nuevo desafío en Aragón

El debate ha entrado de lleno en las aulas. ¿Móvil sí o móvil no? Esa es la pregunta cuando, siendo sinceros y responsables, deberíamos ver el uso en casa y en la sociedad en general. Hemos cedido parte de la responsabilidad educativa a ese pequeño aparato que se ha convertido en imprescindible en solo unas décadas. Sin embargo, nos falta por reconocer que el teléfono no es ni bueno ni malo en sí, sino que lo es el uso que hacemos niños y también mayores. En muchas ocasiones es su utilización, así como las redes sociales, las que están detrás de los casos de acoso escolar, cuya tendencia van al alza en Aragón. Pero también de ideación suicida y de violencia de género y sexual, según se desprenden de los casos notificados a través de los distintos protocolos puestos en marcha en Aragón y que se analizan periódicamente en el Observatorio Aragonés por la Convivencia y Contra el Acoso escolar.

Los números son preocupantes, sobre todo porque detrás de cada número hay un niño que sufre, una familia, un entorno. Lograr la convivencia, que no hay víctimas, ni agresores, ni observadores es un trabajo que compete a toda la comunidad educativa. En menos de dos meses de curso escolar el equipo de orientadores del Observatorio intervino en 91 ocasiones (el curso 22-23 en 229 en total) pero las notificaciones han sido muchas más. 135 de ideaciones suicidas (hubo 649 en todo el curso anterior); 81 de bullying, 29 de violencia de género y sexual y 2 de bandas latinas. En todos ellos, se han incrementado los casos; y además, cada vez son más jóvenes las víctimas.

La consejera de Educación, Claudia Pérez Forniés, ha reconocido en varias ocasiones que lo importante es prevenir. La educación ahí es esencial, trabajar con los más pequeños para que los problemas no crezcan. También van a reducir la burocracia, para que notificar cada caso sea más rápido y por tanto atajar la situación cuanto antes.

El ministerio propone uso cero en Primaria y con supervisión en la ESO

Este aumento de casos, ¿viene provocado por el uso de móviles y redes sociales? La pregunta es clara, la respuesta difusa. 

Madrid, Galicia, Castilla La Mancha y Andalucía ya han prohibido el uso del teléfono móvil en clase. El Gobierno de España quiere poner de acuerdo a las comunidades y busca la unanimidad y conocer los pros y los contras de limitar el uso de pantallas de los pequeños. La ministra de Educación, la aragonesa Pilar Alegría, anunció en diciembre que a principios del 2024 habrá una reunión donde este será el tema de debate, donde se abrirá también a las opiniones de expertos. Cero uso en Infantil y Primaria y en Secundaria, solo bajo el visto bueno del docente es la propuesta del ministerio. También la ministra de Juventud e Infancia quiere poner en marcha un grupo de especialistas.

En Aragón, la consejera planteará también el debate en el próximo Consejo Escolar; pero algunos expertos, así como los padres, han dejado entrever que es necesaria formación y regulación, más que prohibición, tiene siempre «una connotación negativa, que puede ser contraproducente con el alumnado», asegura el presidente de la asociación aragonesa de Psicopedagogía, Juan Antonio Planas. También los padres, a través de Fapar, que son conscientes de los riesgos. Sin embargo, ambos colectivos reconocen que como herramienta es «útil» y reivindican formación. También los sindicatos educativos, que aseguran que serán los docentes los que tendrán esa labor de control. Por eso piden que la norma sea clara y esa labor de autoridad para aplicarla. Las familias no siempre aceptan que el profesor les retire el teléfono a los alumnos, reconocen. También las agresiones a docentes se han incrementado.

El nuevo Gobierno PP-Vox quiere recuperar la zona de escolarización única en Aragón

Mejorar la convivencia en las aulas es uno de los retos del nuevo Gobierno de Aragón, formado por PP-Vox. Y el próximo curso será el que vaya marcando el perfil de la Educación del futuro. El presidente Jorge Azcón, repitió en septiembre que la excelencia, la libertad y la equidad iban a ser las líneas maestras. También una apuesta por la educación pública, pero por toda, es decir, también por la concertada (se financia con fondos públicos). Su presupuesto ya se ha incrementado para este curso. 

Ese apoyo también viene implícito al hacer hincapié en la libertad de elección de centro educativo. De hecho, la consejera de Educación, Claudia Pérez Forniés, ya anunció que se van a modificar las actuales zonas de escolarización para que exista un área unificada, lo que provocará que unos centros queden vacíos y en otros haya saturación. Y también se ampliará el concierto para el Bachillerato, lo que según los grupos políticos de la izquierda provocará una brecha mayor entre alumnos ricos y alumnos pobres. 

Ese perfil ideológico que Vox quiere marcar, lleva implícito el denominado pin parental, donde los padres puedan decidir qué se les enseña a sus hijos. «Sacar la ideología de las aulas», decía el partido de ultraderecha que quería.

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