ENTREVISTA | CONTRACORRIENTE MEDALLA DE ORO NACIONAL EN LAS OLIMPIADAS DE MATEMÁTICAS E INFORMÁTICA

Javier Badesa: «Lo más difícil fue el cansancio, venía de otra Olimpiada el día de antes»

Javier Badesa

Javier Badesa / SERVICIO ESPECIAL

Javier Badesa, bilbilitano de 18 años que estudia Segundo de Bachillerato en el IES Leonardo de Chabacier, ha obtenido medalla de oro este año en las olimpiadas nacionales de Matemáticas e Informática, en las que repite metal, y ahora va a por la de Física...

-Lo primero, enhorabuena por la medalla de oro en la Olimpiada de Informática. ¿En qué consiste una olimpiada de informática?

-Gracias. En este caso, la olimpiada informática en la fase aragonesa tiene varias clases, pero el resto no las conozco, yo participé en la algorítmica, que es la única que tiene fase nacional. En la autonómica, te dan hora y media y te plantean cuatro problemas y tienes que crear un programa que resuelva lo que te piden. Luego un juez valora si lo has conseguido. La fase nacional es similar, pero más larga, fueron cuatro horas el sábado y otras cuatro el domingo, y cada día había que resolver cinco problemas.

-Viene bien hablar con un experto para que lo explique, ¿qué son esos algoritmos de lo que tanto se habla?

-Pues la verdad es que no sabría muy bien cómo definirlos. Podríamos decir que son el procedimiento que tiene que seguir el programa, paso a paso, para resolver el problema que se plantea.

-Volviendo a la olimpiada, al ser medalla de oro en la nacional va a participar en la internacional en Alejandría, ¿le hace ilusión el viaje?

-Desde luego, ya me hizo ilusión la de Aragón, y la nacional. Este año más (ya había obtenido medallas de oro y plata en Matemáticas y Física en anteriores ediciones) porque estaba un poco cansado de hacer la de Matemáticas el viernes y sábado, y no sabía cómo me iba a ir. En esa quedé segundo también (se dan medallas de oro a los seis primeros clasificados) y, como se celebraba en Calatayud y la de Informática en Sevilla, la OIE -la organización- nos permitió hacerla online a mí y a otros 10 más. Lo más difícil fue el cansancio mental de tener que hacer una detrás de otra. Pero estábamos varios en la misma situación, y fue bien. Así que en septiembre iré a Alejandría a la de Informática, y en julio a la de Matemáticas, en Bath (Inglaterra). Voy a tener un verano ajetreado (ríe).

-Y eso si no tiene que viajar más para la de Física, que también tiene la fase nacional en abril. ¿Le resulta tan fácil como parece resolver estos ejercicios, qué le gusta de ellos?

-Me gusta resolver retos nuevos, los problemas son un desafío y es entretenido superarlos. Tienen su dificultad, claro, pero tienen que ser difíciles, si no no serían problemas.

-¿Cómo empezó esta pasión por las olimpiadas?

-En Primero de ESO, mi profesora de matemáticas me dijo que participase en la de Matemáticas, y me gustó. Desde entonces me fue informando de cuáles se iban celebrando y me fui apuntando, pero la dificultad en Bachillerato no tiene nada que ver, en ESO algunas preguntas eran más acertijos que problema.

-¿Encuentra muchas diferencias en los problemas de cada prueba, alguna le gusta especialmente?

-Diferencias hay, pero me gustan todas, por lo que decía, el hecho de resolver retos. Si tuviera que decir una le tengo especial cariño a la de Matemáticas, quizá por ser precisamente la primera en la que participé.

-¿Va bien en todas las asignaturas o hay algo en lo que no destaque?

-En Bachillerato la verdad es que voy bien en todo; es sobre todo memorizar, así que no es muy difícil.

-¿Y los compañeros qué le dicen tras tanta medalla de oro, lo saben ?

-Sí, lo saben, y alguna vez me han felicitado.

-¿Ya tiene claro lo que va a estudiar? No me diga que arte...

-Arte, como que mal (ríe). No, no lo sé del todo. Matemáticas estudiaré seguro, pero probablemente haré un doble grado, y aún no sé si lo combinaré con Informática o Física.

-¿Le gustaría dedicarse más bien a la investigación, a la docencia o a algún otro campo?

-No lo tengo claro aún. Podría valorar la docencia, pero tendría que pensarlo. Tengo tiempo de sobra, aún estoy haciendo Segundo de Bachillerato...

Suscríbete para seguir leyendo