Presentación

Javier Lambán: "Aragón se tendrá que sacar solo las castañas del fuego"

Cerca de 300 personas acompañan a Javier Lambán en el Salón de Plenos de la Diputación de Zaragoza en la presentación de sus memorias, un repaso a toda su trayectoria política, los episodios señalados y una previsión militante del futuro de Aragón y España

Sergio H. Valgañón

Sergio H. Valgañón

Pocas presentaciones literarias en Aragón generarán tanta expectación como la de Javier Lambán este jueves en la Diputación de Zaragoza. Bajo el título Una emoción política, las memorias del expresidente de Aragón concentraron este jueves a cerca de 300 personas deseosas de escuchar los secretos revelados por el líder socialista en un libro que nace en Ejea y se atreve a mirar al futuro, con la meta en la nueva España que quiere ver Lambán en 2036.

Las presentaciones de celebridades tienen casi tanto interés sobre el escenario, en el que Lambán estuvo acompañado por el escritor Sergio del Molino y la periodista Encarna Samitier, como entre el público. Liderado por Jorge Azcón, actual presidente autonómico, y el presidente provincial Juan Antonio Sánchez Quero, la plana de ilustres invitados recorría tantos nombres como los que recoge el propio Javier Lambán en sus memorias. La práctica totalidad de sus consejeros de Gobierno, en la reaparición pública de Arturo Aliaga y Maru Díaz, el grupo parlamentario y municipal de los socialistas, alguna concejala del Gobierno del Ayuntamiento de Zaragoza como Marian Orós y un nutrido número de representantes empresariales, de la sociedad civil y de diferentes asociaciones e instituciones.

Toda la militancia socialista estaba invitada, como atestiguaban diputados y alcaldes del PSOE repartidos por todo el territorio, asegurando el lleno en la sala. La carta con el ofrecimiento no debió llegar a Huesca, ya que la federación oscense se ausentó de la presentación literaria de su todavía jefe de filas.

No fueron las discrepancias internas, ni en Aragón ni en el PSOE nacional, ni siquiera el conflicto con Cataluña el núcleo de una presentación que Lambán quiso llevar a la emoción y a la reflexión por encima de la guerra y el ajuste de cuentas. De hecho, rechazó esa postura en la puesta de largo del lanzamiento editorial como ya había hecho en la entrevista con este diario: el libro, hasta la fecha, es para el expresidente un ejercicio de militancia activa y un análisis de lo hecho en las instituciones por encima de un señalamiento a todos aquellos que le hicieron más complicado el camino.

Su mayor rival, por encima de cargos y siglas, ha sido la salud. Pidió perdón el líder socialista al comenzar la tarde aludiendo que estaba cercano el carpetazo de su vida política «pero no el termino de la vida biológica». Como bien explicó, las sesiones de quimioterapia le están afectando a la voz.

«Aragón se tendrá que sacar solo las castañas del fuego, porque no nos van a ayudar desde fuera», aseguró Lambán, en referencia directa a Azcón, que asumió el roto afirmando. El expresidente autonómico defendió su gestión y la autonomía que siempre mantuvo frente a Cataluña o Moncloa, en defensa de los intereses de la comunidad: «Por ejemplo, con los Juegos Olímpicos de invierno, siempre pedí que fueran en igualdad con Cataluña». Sobre ese proceso, recordó que «tan solo Pere Aragonés fue el único que no me mintió», afirmando que se sintió engañado por la postura final del Comité Olímpico Español y por el Gobierno central.

Pidió Lambán, de nuevo, una mayor cooperación de PP y PSOE rumbo a la centralidad, «porque deben aceptar que se necesitan», y clamó por «una reacción cívica» que aleje a España de una dirección que, como lleva expresando bastante tiempo, no es del agrado del líder socialista aragonés.

«Su idea de política es sustancialmente distinta a la que tengo yo», señaló Lambán en referencia al presidente Pedro Sánchez, aunque no se hundió mucho en el conflicto orgánico que ambos mantienen desde hace casi una década. Criticó, eso sí, la deriva de una clase política «en la que faltan pensadores, porque no hay reflexión interna y en el PSOE se lleva muchos años sin plantearse un verdadero proyecto político».

Una hora de Javier Lambán da para mucho, para conocer más a la persona y reconocer el pasado y la obra sobre el territorio. También, para quedarse con las mejores memorias, como dijo el expresidente: «La política permite conocer a lo más cuestionable de la sociedad, pero también a la gente más maravillosa». Este jueves estaban en la DPZ muchos de los mejores de la vida Lambán.