El gasto en la plantilla 2021-22 fue el segundo mayor de la historia del Casademont Zaragoza

El Casademont gastó 3.122.221 euros en un año con ocho fichajes durante la temporada

Sainz, Benito, Lalaguna, Garcés, Echeverribar y Costa, con la Copa de la Reina.

Sainz, Benito, Lalaguna, Garcés, Echeverribar y Costa, con la Copa de la Reina. / ANGEL DE CASTRO

El Casademont Zaragoza gastó 3.122.221 euros en sueldos y salarios de la plantilla deportiva en la temporada 2021-22, lo que supone la segunda mayor cifra de la historia del club, solo superada por los 3.518.760,80 euros del primer curso en la ACB. Así se recoge en la Memoria Abreviada del ejercicio anual terminado el 30 de junio de 2022, unas cuentas que la SAD aprobó por unanimidad en la Junta General Ordinaria de Accionistas celebrada el pasado 19 de junio en las oficinas del club.

Este gasto supone un incremento notable de una partida que se había estabilizado en torno a los dos millones de euros y que se ha disparado en las dos últimas temporadas auditadas, coincidiendo con un mayor cambio de jugadores y entrenadores durante el curso. Esos 3.122.221 euros suponen un incremento notable, de más de medio millón, con respecto a los 2.567.259 euros de la temporada 2020-21, que a su vez ya se habían incrementado en más de medio millón sobre el curso precedente (2.106.266,00 euros).

Otra de las partidas que provocó ese aumento fue la de indemnizaciones, que se elevó a los 302.264 euros, algo más del doble de los 144.487 del año anterior. En cambio, la de derechos de imagen bajó hasta los 49.059 euros. Además, el club tuvo un gasto de 240.423 euros en personal no deportivo y 246.200 euros en otras cargas sociales. En total, los gastos de personal ascendieron a 3.608.844 euros, cifra sensiblemente superior a los 3.081.804 euros del curso 2020-21.

El gasto en la plantilla se disparó ese curso 2021-22 porque el Casademont Zaragoza fue el club de la ACB que más cambios hizo: director deportivo, entrenador y ocho jugadores a lo largo de la campaña. Empezaron el curso Pep Cargol en la dirección deportiva y Jaume Ponsarnau en el banquillo y la terminaron Toni Muedra y Dragan Sakota. En cuanto a la plantilla, ocho de los jugadores que terminaron la temporada no la habían empezado.

Fue otra temporada convulsa llena de idas y venidas. Primero fueron las lesiones de Omar Cook y Santi Yusta, que propiciaron las llegadas de Kenan Sipahi y Adam Waczynski. Después se lesionó McLean y la entidad aprovechó para recomponer el cinco con Deon Thompson. En diciembre llegó Jordan Bone para reemplazar a Sipahi, después el club cortó a Matt Mobley y cedió a Javi García. Okoye se lesionó pero la entidad no cubrió esa baja. En marzo dejó el club después de más de una década Pep Cargol y llegó Toni Muedra, que poco después tuvo que despedir a Ponsarnau y confió el equipo a Dragan Sakota. Además llegaron Sean Kilpatrick, Frankie Ferrari y Christian Mekowulu. Estas dos últimas incorporaciones resultaron clave para que el equipo pudiera sellar la salvación de manera agónica, gracias a la victoria del Tenerife en Andorra. Un total de 19 jugadores formaron parte de la primera plantilla ese curso. En la campaña anterior fueron tres entrenadores y 20 jugadores.

La tendencia

Así, es la primera vez desde que el club consiguió estabilizarse en la máxima categoría tras su segundo ascenso en 2010 que el gasto en plantilla supera los tres millones de euros. En este periodo la cifra más alta correspondía a la temporada 2015-16 con 2.689.734 euros y solo en una ocasión, el curso 2011-12, se quedó por debajo de los dos millones (1.987.058 euros). Desde la 15-16 el gasto se había estabilizado entre los 2 y 2,1 millones de euros.

Pese a ese notable incremento en el gasto de la plantilla deportiva, Basket Zaragoza 2002 SAD consiguió cerrar el ejercicio en junio de 2022 con tan solo 52.021 euros de pérdidas, una cifra significativamente menor que en las tres temporadas anteriores. Esto se debió a la recuperación de ingresos por abonados y taquillas tras el corte drástico que supuso el covid y jugar a puerta cerrada, elevando la cifra de negocio a los 3.557.277 euros en la temporada 2021-22, la segunda más alta en los últimos once años, solo superada por la campaña 2019-20.

Es lo que se recoge en las cuentas anuales del ejercicio, en punto número 5, sobre inmovilizado tangible, se recoge que en esa temporada 21-22 se dio de baja «la totalidad de los derechos de adquisición de jugadores que corresponden con el importe pagado en ejercicios anteriores por la adquisición de un jugador y el cual se encontraba totalmente amortizado al cierre del ejercicio. Este hecho viene motivado por la concesión de la incapacidad permanente al mencionado jugador».

Reynaldo mantiene el 46% de las acciones pendiente de la ampliación

El accionariado de Basket Zaragoza 2002 SAD no varió durante la temporada 2021-22. Al cierre del ejercicio solo había tres sociedades con un porcentaje de participación superior al 10% del capital social y Reynaldo Benito, el presidente del club, mantiene el control del 46,05% del accionariado, a través de la sociedad Rev Inversiones y Asesoría Revia SL. Lumbrada 2000 SL, la empresa de Emilio Garcés, posee un 18,81%, mientras que la Fundación Basket Zaragoza posee el 15,93% del accionariado.

No obstante, a fecha de la formulación de las cuentas queda pendiente de ejecución el acuerdo del 1 de marzo de 2022 en el que se aprueba dejar sin efecto la ampliación de capital acordada en diciembre de 2020 y, al mismo tiempo, aprobar la ampliación propuesta el 1 de febrero de 2022 por importe de 720.006 euros. Una medida para reestablecer el equilibrio patrimonial de la sociedad. Una fórmula que la SAD ha repetido en varias ocasiones en los últimos años para equilibrar sus cuentas.