Síguenos en redes sociales:

REPORTAJE

Estopa, rumba en el Teatro Romano

De Madrid a Barakaldo. De Barakaldo a Barcelona. Y de Barcelona a Zaragoza. No, no se trata de ningún rally. Es la ruta que los hermanos Muñoz, Estopa, realizaron ayer con motivo del Día Estopa organizado por Cadena Dial. Eso sí, en avión privado. Y qué mejor enclave para despedir un día tan ajetreado, con una entrevista y tres conciertos, que el Teatro Romano de Zaragoza.

"Anda que no saben los pijos cuando tienen un avión privado... Hay que ver qué bien se va. Nos sentimos como Elvis... Costello. Presley no. Bueno, da igual". Con su habitual sentido del humor, el dúo de Cornellá ofreció en la capital aragonesa un mini concierto , aperitivo sin duda del que darán el próximo día 11 de octubre en una de las actuaciones que están programadas para las Fiestas del Pilar.

Aunque más íntimo (unas ochenta personas sentadas, invitadas, y otras cien mirando a través de las verjas de la calle a gran distancia), los Estopa supieron sacarle el máximo partido a la acústica de la construcción romana (aunque al emitirse en directo por Cadena Dial tuvieron que tener tras de sí un equipo de sonido) y deleitaron al personal con diversos temas de su último disco ¿La calle es tuya?

Y, la verdad, como método para abrir boca antes de los Pilares, salieron airosos de su examen zaragozano, porque no defraudaron y el público se entregó completamente a sus voces desgarradas y los acordes de una única guitarra española, que, por cierto, se les quedó sin pilas. "Llevamos ya todo el día tocando-- decía David -- y la pila de la guitarra debe de estar a punto de acabarse. No sé si aguantará... ". Premonitorio o no, el caso es que, después de tocar Tragicomedia , el tema con el que abrieron el concierto, la guitarra perdió toda su potencia cuando sonaban los acordes de Penas con rumba . Cuando terminaron de interpretar la canción, David Muñoz, socarrón como siempre, afirmó: "Hey, que se ha quedado sin pilas la guitarra". Tras unos segundos en los que un técnico de sonido colocó otras en el instrumento, apuntó, siempre con un gran sentido del humor: "Es que lleva alcalinas... Duracell, de las que duran. Nosotros, sin embargo, no necesitamos pilar. Con el Cola Cao de la mañana vamos que te matas".

Después de este tema, los Estopa prosiguieron su recital con Apagón y Pastillas de freno , que fue una de las canciones más aplaudidas, porque para hacer los coros, los rumberos catalanes se apoyaron en el público, que estaba a medio metro del escenario ("a un almo", como decían ellos) para, enfocando hacia él el micrófono, darle la oportunidad de aportar su cante al estribillo.

Sin duda fue un bonito espectáculo en el que los catalanes Estopa se entregaron completamente, algo que agradeció el público zaragozano, conscientes de la maratoniana jornada que los hermanos Muñoz llevaban ya a sus espaldas.

Pulsa para ver más contenido para ti