Qué se ha hecho, cómo se ha restaurado y qué queda por rehabilitar. A estas tres preguntas intenta responder la exposición semipermanente La catedral de Tarazona. Plan director y restauración, que ayer se inauguró en el claustro (reabierto para la ocasión) por parte de la consejera de Cultura del Gobierno de Aragón, Dolores Serrat, que estuvo acompañada por el obispo de Tarazona, Eusebio Hernández Sola, el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Tarazona, Luis José Arrechea, la directora de la Obra Social y cultural de CAI, María González; el responsable del plan director de la seo, Fernando Aguerri; y el presidente de la Fundación Tarazona Monumental (organizadora de la muestra), Agustín García Inda.

La muestra está dividida en siete bloques temáticos explicados en paneles, donde se da a conocer el propio plan director, la arqueología, la ingeniería de la restauración, el futuro y el culto, etc. Y se acompaña de piezas arqueológicas y arquitectónicas descubiertas en los 15 años de obras de la catedral, como una colección lapidaria vinculada al ciclo de la vida del cristiano: una pila bautismal, el fragmento de la tapa de un sarcófago, la lauda sepulcral de Jorge de Burgos o Jorge de Bardaxi, así como la sepultura del obispo García Frontín, casi completa. Eso sin olvidarse del neocimborrio, que abre la muestra, una reproducción del interior del cimborrio decorado con las grisallas por las que se conoce a la catedral con el nombre de la Capilla Sixtina del Renacimiento español; el retablo de la luz, que reúne vidrieras de distintas épocas; o el Figurat, con piezas sueltas como gárgolas o capiteles. Además, se puede ver un audiovisual que ejerce como testimonio videográfico del estado de la seo al comenzar el plan director de 1997.

García Inda puso de manifiesto que la inauguración es esta exposición la "culminación de un proyecto cultural" que pretende "acercar este monumento a la sociedad". También Fernando Aguerri hizo hincapié en esa labor de difusión de los procesos realizados porque "no solo se restaura un edificio sino un legado documental que pasa a formar parte de la sociedad y que hay que continuar".

En un símil futbolístico, Dolores Serrat, indicó que la catedral es un ejemplo de esfuerzos entre lo público y lo privado --el acto sirvió para agradecer a los patronos que han hecho posible la muestra--, porque "la unión hace la fuerza", y hace que pensar que "juntos podemos".

La consejera no se olvidó de sus predecesores en el cargo, que "apostaron por la restauración de la catedral de Tarazona"; ya que desde su inauguración, el número de visitas ha ido aumentando (67.000 en un año), convirtiéndose en "motor de desarrollo económico".

La exposición (hasta el 20 de mayo hay puertas abiertas) sirve también para recordar que todavía hay pendientes de restauración 18 capillas, el propio claustro o el pórtico principal, aunque Serrat aseguró que "la catedral de Tarazona es una de las prioridades del Gobierno de Aragón".