Los jugadores del Real Zaragoza se fueron de Riazor con la sensación de haber perdido dos puntos, aunque en general reconocieron que el empate final tampoco podía considerarse injusto. "Nos vamos con un sabor agridulce total. El partido ha sido igualado, pero cuando te empatan en los minutos finales siempre te vas con ese sabor. Pienso que el equipo ha sabido sufrir porque ellos nos han empujado y nos tenemos que quedar con eso", dijo Víctor Rodríguez, autor del gol zaragocista.

José María Movilla, que actuó en el doble pivote junto a José Mari por las bajas por lesión de Paglialunga y Acevedo, afirmó que "no ha sido un partido vistoso para el espectador, con dos equipos intentando no cometer fallos, y se ha decidido en acciones a balón parado". A Movilla le hubiera gustado ganar en Riazor, "porque eso nos hubiera dado un empuje importante", pero también reconocía que "puntuar en campo de un rival directo también es importante".

En Riazor actuó por primera vez esta temporada con el primer equipo en Liga el centrocampista del filial Tarsi, que se lamentaba de no haber podido disfrutar de una victoria. "La verdad que me he encontrado bien en el campo y he tratado de darle continuidad al equipo cuando he tenido el balón, pero, aunque estoy contento por el debut en Liga en esta temporada, no puedo estar satisfecho porque se nos ha escapado la victoria cuando mejor lo teníamos", afirmó.