"Actualmente, la preocupación principal se centra en la inflación y en la cotización del euro. La inflación es demasiado baja y el euro, demasiado fuerte". Así definió ayer el presidente de La Caixa los principales peligros de la economía europea. Respecto a la española, Fainé se mostró convencido de que los datos del primer trimestre permiten un cierto optimismo. "La demanda interna, especialmente la inversión, responde mejor de lo que se esperaba y el PIB creció un 0,4% en relación al trimestre anterior". "Si tal y como prevemos, se mantiene este ritmo de crecimiento en los próximos trimestres, el PIB crecerá un 1,2%".